fbpx
Connect with us

Entrevistas

Juan Carlos Schmid: “El desafío es transformar la bronca en una alternativa”

En diálogo con La Columna Vertebral – Historias de Trabajadores, el secretario general del Sindicato de Dragado y Balizamiento y de la CATT, Juan Carlos Schmid, analizó el escenario político posterior a las elecciones, los desafíos del peronismo y el sindicalismo, y la necesidad de construir una alternativa que supere la bronca social. También se refirió a los problemas estructurales de la Argentina, como las jubilaciones, la educación, los cambios en el mundo del trabajo y el rol de los sindicatos frente a las transformaciones tecnológicas.

LCV: “¿Cómo estamos en esta jornada posterior a lo que fueron las elecciones de ayer?”
Juan Carlos Schmid: “Hemos registrado una nueva jornada electoral donde se expresó el pueblo argentino. Habrá que ver de acá en adelante cómo nos organizamos para desplazar definitivamente a este gobierno del escenario nacional.”

LCV: “¿Cuál es el escenario que ves de posibilidades? ¿Esto fue un voto castigo circunstancial o puede abrirse un espacio para que el peronismo, el sindicalismo y las distintas fuerzas sociales construyan una alternativa?”
Schmid: “Tanto en el gobierno nacional como en el kirchnerismo, las peleas internas continúan y no sabemos si podremos conformar esa fuerza necesaria. El desafío es transformar la bronca y el rechazo en una propuesta alternativa. Ese es el gran desafío de la oposición: construir una alternativa que nos saque para adelante, que hable del futuro y que haga que los actores políticos jueguen un papel clave para salir del laberinto en el que está la Argentina.”

LCV: “¿Creés que nuestros dirigentes están a la altura de lo que expresa el voto popular?”
Schmid: “La dirigencia política se ha debatido en la incapacidad de encontrar fórmulas superadoras. El experimento de Milei expresa de alguna manera todo eso.”

LCV: “¿Y entonces, cómo seguimos?”
Schmid: “Buscando dentro del escenario nacional a quienes comprendan que la política es servicio al bien común, al interés general y no un ejercicio de poder infinito. Los actores políticos han perdido hace mucho tiempo el sentido de trascendencia de esta función pública. El político debe ser un servidor de lo público.”

LCV: “¿Habrá reuniones de la CGT, de la CAT y de las dirigencias gremiales para aprovechar este nuevo escenario y retomar los reclamos laborales?”
Schmid: “Una cosa es el reclamo sindical y otra los problemas que debe resolver la política. Hay reclamos que exceden el proceso electoral, que atravesaron gobiernos nacionales y populares, y que también persisten en la etapa de Milei. Son problemas profundos de la economía y de la sociedad que la política no ha resuelto y que requieren una síntesis difícil de alcanzar. Por supuesto que debemos redoblar nuestros reclamos, pero también encontrar el equilibrio exacto del menú.”

LCV: “Lo que planteás requiere paciencia, estrategia y manejar el cansancio social en un contexto de transformaciones en el mundo del trabajo. ¿Cómo se ubican los sindicatos frente a las innovaciones tecnológicas y los nuevos métodos de producción?”
Schmid: “Los reclamos no son homogéneos. El tema jubilatorio, por ejemplo, atraviesa todo el período democrático y aún no se resolvió. Que tengamos jubilados con ingresos tan bajos habla mal de una sociedad que se dice civilizada. Si queremos seguridad social, los recursos no pueden salir solo del trabajo: se necesitan aportes de otros sectores. Eso requiere construir poder social y que la política encuentre fórmulas de respuesta. En los últimos 50 años la tasa de reposición jubilatoria nunca superó el 50 o 60% del salario en actividad, lo que es una debacle. La otra cuestión central es la educación: hubo gobiernos que aumentaron el presupuesto, pero la educación no mejoró. Tenemos una declinación y es un problema social que también involucra a los sindicatos.”

LCV: “Lo que ocurrió en las elecciones también frena, al menos por ahora, la reforma laboral y jubilatoria. ¿Cómo sigue la pelea?”
Schmid: “Está bien que se rechazara, pero las formas de producción siguen ahí: aplicaciones digitales, inteligencia artificial y nuevas dinámicas de trabajo que van a complejizar el futuro. Debemos discutirlo con inteligencia, con debate de carne y hueso, no artificial.”

LCV: “Te felicitamos porque acabás de ser reelegido.”
Schmid: “Sí, el viernes fui reelegido al frente de la FEPINRA. El Congreso se realizará el 6 de octubre.”

LCV: “Esto también es importante porque pone en debate no solo la situación de los trabajadores, sino la de los puertos, el negocio portuario y la cuestión ecológica.”

Seguir leyendo
Comentá

Leave a Reply

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.

Entrevistas

El voto castigo y la emancipación del peronismo: entrevista a Pablo Touzon

En diálogo con La Columna Vertebral-Historias de Trabajadores, el politólogo, director de Panamá Revista y codirector de la consultora Escenarios, Pablo Touzon, analizó la última jornada electoral del 7 de septiembre en la provincia de Buenos Aires y los resultados que sorprendieron al oficialismo nacional y a las encuestadoras. Habló sobre la economía cotidiana, el voto castigo, el rol de Cristina Kirchner, la crisis del oficialismo y la perspectiva de futuro para el peronismo.

LCV: “¿Cómo viviste la jornada de ayer? ¿Fue todo una gran sorpresa? ¿Te sorprendiste como todos los demás encuestadores? ¿Qué grado de sorpresa hubo? ¿Solamente en el número o también en qué lectura de acuerdo a los focus que estuviste haciendo en los últimos días?”

Pablo Touzon: “Lo que me sorprendió, como al resto de los colegas, fue sobre todo el número, la amplitud. Que el peronismo ganara por algunos puntos ya estaba presente en las últimas semanas, amplificado por el quilombo de las coimas. Lo que me sorprendió fue cómo el peronismo volvió a ser una herramienta de castigo. En los últimos años las mayorías se armaban castigando al peronismo, desde Juntos hasta La Libertad Avanza, con Cristina Kirchner como eje ordenador. Esta vez no hubo un voto castigo contra el peronismo, sino a favor de usarlo como canal de descontento. No creo que hayan aparecido kirchneristas de un día para otro: se respondió a un malestar microeconómico, a la economía del bolsillo de casa. Si bien hubo validación de la baja de la inflación en 2024, desde el triunfo de Adorni hasta acá el gobierno acumuló equivocaciones. El salario no alcanza, la bronca contra el maltrato a jubilados y empleados públicos, el ajuste, todo eso configuró una tormenta perfecta. El menemismo también tuvo corrupción, pero en un contexto de auge. Acá se sumó corrupción con crisis. La apuesta oficialista fue Cristina, pero ella no compitió, lo cual favoreció al peronismo para construir otro relato. Lo de San José 1111 fue patético: soberbia y egoísmo. El peronismo, en cambio, mostró lo que llamo una desobediencia constructiva: no hizo campaña por ‘Cristina Libre’, sino que se emancipó de esa tutela. Es un principio de emancipación del peronismo bonaerense. Como Milei fue una herramienta del pueblo para terminar un orden, ahora el peronismo puede empezar algo nuevo. No es un perdón total al Frente de Todos, pero sí un puntapié.”

LCV: “Durante mucho tiempo la calle definió las protestas en términos de violencia. ¿Hoy ves otra forma de protesta, como lo que pasó ayer en las urnas?”

Pablo Touzon: “Sí. La desaparición de los piquetes en 2024 estuvo bien ponderada, incluso por los pobres. El peronismo tendrá que decidir si empieza un sendero de reforma para entender qué no funcionó del Frente de Todos. En general se vuelve más rebelde cuanto más lejos está del poder. Hoy, con la validación popular en la provincia de Buenos Aires, no puede desertar otra vez. Tiene que decidir qué hacer con la economía. No basta con resistir. Tal vez sea más fácil construir una alternativa cuando el espejo del mal gobierno es tan claro. No digo volver al peronismo del 45, pero sí a una política más humana y profesional. La gente votó profesionales: se cansó de experimentos y de personajes exóticos. Eligió a quienes podían hacerse cargo de la seguridad, de la economía y de los derechos. Frente a improvisación, optó por oficio. El gran agujero del peronismo sigue siendo la economía: no puede repetir errores. No se trata de planes y contención, sino de poner la industria en marcha. Ese es el principal desafío. El gobierno de Adorni quedó sin aliados y subsumido en un PRO que perdió. El peronismo tiene que aprovechar la expectativa, como lo reflejó Nacho Ramírez en su discurso junto a Kicillof. La gente siente que ‘se puede’. En cambio, el gobierno solo propone una mesa política con los mismos mariscales de la derrota, sin gobernadores, lo cual muestra más encierro que apertura.”

LCV: “Ayer corría la versión de que Macri no había mandado fiscales del PRO. ¿Creés que pudo haber hecho eso?”

Pablo Touzon: “Podría ser, pero no creo que tenga tanto poder. Lo que sí es claro es que el PRO ya no existe como estructura: se subsumió en algo que perdió. El error de Macri fue postular a su primo en la Ciudad: se quedó sin territorio. El gobierno quedó sin proyección política. Por eso hoy no hay figuras de peso: Jorge Macri está callado, Vidal también. El PRO se apagó. Al final todo se reduce a memes, a frivolidad política. Pero la payasada se terminó y el gobierno tiene que seguir.”

Continue Reading

Destacada

Francisco Martínez: “En Textiles Pigüé nadie se queda afuera”

En el sudoeste de la provincia de Buenos Aires, donde alguna vez funcionó la ex-Gatic, hoy late la vida de la cooperativa Textil Pigüé, una empresa recuperada que reúne a más de 170 trabajadores y trabajadoras. Nacida en 2003 tras el cierre y desalojo de la antigua planta, Textil Pigüé se convirtió en un emblema de autogestión obrera, sosteniendo puestos de trabajo y construyendo comunidad en medio de las crisis económicas que atraviesa el país. Francisco Martínez, su presidente, repasa el presente de la fábrica, los desafíos de la industria textil y el valor de las políticas públicas para fortalecer la economía cooperativa.

LCV: “Francisco, contanos un poco. Ustedes son un lugar de lucha desde 2003, dando un ejemplo de autogestión y recuperando puestos de trabajo. Hoy, con la debacle de la industria textil en Argentina y la competencia desleal de los importadores chinos, ¿cómo están trabajando?”
Francisco Martínez: “Se trabaja con muchísima preocupación, a déficit desde que asumió el gobierno de Javier Milei. Pero en estos 21 años ya vivimos otras crisis. Supimos encarar una fábrica de 25.000 metros cubiertos dedicada a la industria textil, símbolo de lo que fue Gatic. Siempre sostuvimos que ni el mercado ni los gobiernos deciden la suerte de un trabajador: quienes estuvimos desocupados sabemos lo que significa la fragmentación social y familiar. Por eso preferimos que, aunque baje la producción como pasó con Macri —cuando aumentaron un 3000% las tarifas y quedamos con cinco quincenas atrasadas— o como ahora, que bajamos de 180 toneladas a 70, estemos todos adentro. Eso implica trabajar a déficit, pero con horarios, responsabilidades, asistencia social, salud, nutrición y educación. Hoy incluso escrituramos lotes para viviendas familiares. El contexto es duro, pero confiamos en salir adelante gracias a la militancia de trabajadores y trabajadoras. Nosotros no somos patrones ni dueños, somos socios, y aunque competimos en un mercado golpeado, contamos con una estructura sólida. La escrituración de la fábrica en 2014 nos convirtió en sujetos de crédito, algo que pocas recuperadas tienen, y eso nos da mejores condiciones para sostener la producción.”

LCV: “Francisco, es alentador escucharte. Me gustaría que nos hicieras una pintura de qué pasó ayer para ustedes, para el sector cooperativista. ¿Cómo fue la jornada y el cierre, cuando se dieron cuenta de que la provincia se pintaba de azul?”
Francisco Martínez: “Con mucha alegría. Hemos trabajado con políticas públicas concretas de la provincia: escrituración de la planta, de 200 lotes, espacios de primera infancia, huerta, invernadero, urbanización del barrio, infraestructura y una subdelegación del Ministerio de Trabajo en Pigüé para evitar que la gente viaje 50 km a Coronel Suárez. Cada ministerio aportó herramientas y eso nos dio una alegría enorme. La única congoja es que la sexta sección electoral, donde está Pigüé, es difícil para el peronismo y nunca se gana. También sufrió Blanca, cabecera del distrito.”

Continue Reading

Destacada

“Sapos de otro pozo: la memoria y las voces de las infancias en el exilio”

El exilio político marcó no solo a quienes lo vivieron directamente, sino también a sus hijos e hijas, que crecieron atravesados por la distancia, el desarraigo y la búsqueda de identidad en tierras lejanas. En esta entrevista con Violeta Burcart, productora, docente y comunicadora, exploramos esa experiencia desde una mirada profunda y plural, reflejada en el libro Sapos de otro pozo. A través de sus relatos y reflexiones, comprendemos que el exilio no es solo un destino geográfico, sino una condición que atraviesa generaciones y que plantea desafíos únicos en la construcción de la memoria y la pertenencia. La Columna Vertebral – Historias de Trabajadores invita a escuchar esas voces para entender mejor la historia que a veces se queda fuera de los libros.

LCV: “¿Cómo te va, Violeta?”

Violeta: “Bien, mi gran pasión es la radio, y estoy muy contenta de estar acá.”


LCV: “Hace unos años pude ver Argenmex exiliados, la película que fue tu tesis. ¿Cómo fue ese proceso?”

Violeta: “Hice la tesina de comunicación social como trabajo de producción, buscando qué pasaba con quienes nacimos o crecimos afuera, con un recorte geográfico en México. Pero luego me di cuenta de que el recorte era generacional, no geográfico. Los hijos del exilio de padres militantes compartimos mucho, sin importar que hayamos vivido en 27 países diferentes. Por eso el nombre Sapos de otro pozo: siempre nos sentimos raros. El libro rompe dos mitos: uno, que los exiliados la pasaron mal o la pasaron bien sin problemas; y otro, que los niños no sufrían el exilio. También habla de la solidaridad que recibimos en países que nos alojaron, cómo formamos familias y aprendimos nuevas culturas. Por suerte, la mayoría fuimos bien recibidos.”


LCV: “¿Podés contar alguna anécdota que refleje esa adaptación?”

Violeta: “Sí, por ejemplo Julio Fernández Barayar contó que su hijo aprendió a leer en sueco y un día le preguntó: ‘¿Te estás lavando los dientes con la crema de afeitar?’ Son historias graciosas de la adaptación cultural. Además, el exilio muchas veces implicó sobrevivir sin trabajo, vendiendo bijú o haciendo changas. Los hijos atravesamos etapas de enojo con nuestros padres, que a veces no entendíamos.”


LCV: “¿Qué respuestas recibían sobre por qué tuvieron que nacer en ese contexto de exilio?”

Violeta: “La respuesta típica es que nuestros padres militaban y apostaban a la vida sin saber cómo iba a terminar todo. Es cierto que llevamos esa tristeza o bronca, pero también llevamos las banderas, y hoy decimos que el exilio es una violación a los derechos humanos. El exilio no es una elección, no es como ir a buscar una vida mejor, es ser expulsados sin saber cuándo volveremos.”


LCV: “En el libro, hay también un tratamiento sobre el ‘desexilio’. ¿Qué significa para ustedes?”

Violeta: “La mitad del libro se llama Exilios y la otra mitad Desexilios, una palabra tomada de Mario Benedetti. Habla de las vueltas, de lo que trajimos o dejamos. Muchos seguimos viviendo fuera o en países distintos. Algunos eligieron volver, otros no. El desexilio a veces fue tan difícil como el exilio mismo, porque volvíamos a un país devastado después de la dictadura, o que ya no era el nuestro. Hay muchas historias cruzadas entre exiliados de distintos países que nos encontramos y formamos redes.”


LCV: “¿Cómo se cuenta esa experiencia coral en el libro?”

Violeta: “Es un libro coral con más de 100 relatos de 27 países, con cuentos, poesías, grabaciones, y códigos QR para escuchar y ver videos. Se incluye también la dictadura chilena y uruguaya porque las historias se entrecruzan. Hay mezcla de culturas, idiomas, modismos, y relatos de cómo nuestras vidas se cruzaron y mezclaron. Por ejemplo, en un cumpleaños un niño notó que en otras casas cantaban las mañanitas, algo que antes podía llevar a represalias, pero que hoy es parte del reconocimiento cultural.”


LCV: “¿Cuál es la transmisión de estas historias hacia las nuevas generaciones?”

Violeta: “El libro habla a nuestros padres y también a las próximas generaciones. Muchos ya son padres y madres que comienzan a entenderlo mejor. Hoy muchos están partiendo por exilio económico y creemos que es importante cuidar a las infancias que atraviesan estas situaciones, porque hay niños que se quedan sin sus padres en contextos de guerra o crisis. El lugar que nos crió puede ser ahora más amable que nuestra patria original, aunque también vivimos en un contexto difícil y con discursos que nos complican.”


LCV:
“¿Cuáles son los próximos proyectos de la agrupación Hijas e Hijos del Exilio?”

Violeta: “Estamos preparando actividades para el 8 de marzo en distintos puntos del país, como Córdoba. También queremos extender las presentaciones a otros países, México y Chile, en el marco de los aniversarios de los golpes de estado. Queremos hacer algo fuerte para los 50 años y seguir visibilizando la memoria del exilio.”


LCV: “Contá con nosotros para lo que necesiten, Violeta.”

Violeta: “Gracias, los quiero mucho.”

Continue Reading
Advertisement

Facebook

Copyright © 2017 Zox News Theme. Theme by MVP Themes, powered by WordPress.