En un contexto de crisis económica que parece repetirse cíclicamente en la Argentina, las cooperativas siguen demostrando que el trabajo colectivo es una herramienta poderosa de resistencia. Carlos Galeano, trabajador y referente de la cooperativa Galaxia, conversó con La Columna Vertebral sobre el nacimiento del proyecto en medio del colapso del 2001, la apuesta por la innovación tecnológica, el trabajo con jóvenes y el valor de sostener la producción nacional con calidad y compromiso.
LCV: “Contame un poco de qué se trata. Me interesó esto de productos industriales robustos. ¿Cuáles son?”
Carlos Galeano: “Nosotros nos especializamos en lo que son una línea hogar y una línea industrial. La línea hogar se compone de extractores de aire, campanas de cocina y purificadores. La línea industrial es lo que se llama la línea robusta, a la cual te referís. Son motores eléctricos de hasta un sexto de HP.”
LCV: “La palabra ‘robusta’ asociada a la industria, para mí tiene que ver con la pujanza más que con el volumen. Por eso te preguntaba exactamente qué significaba en este caso hablar de productos robustos y eficientes.”
Carlos Galeano: “Más que nada, tiene que ver con la calidad. No solo no la hemos reducido, sino que la hemos mejorado. Eso implica mayor duración del producto nacional, y en este caso, del producto realizado por nuestra cooperativa.”
LCV: “Ahora sí, contame cómo nació hace 70 años Galaxia.”
Carlos Galeano: “Nosotros somos producto de la crisis del 2001. La empresa en la que trabajaba, Bellinca, con más de 70 años de trayectoria en la producción nacional de productos para la industria, presentó concurso de acreedores en 1996 y finalizó en quiebra a fines de 2001. Nos enfrentamos a una situación crítica: íbamos a quedar sin trabajo. La única alternativa fue formar una cooperativa, aunque no conocíamos su funcionamiento. Con la ayuda del municipio de Quilmes, empezamos a organizarnos. Los primeros 20 asociados comenzamos a gestionar la empresa fallida y, desde entonces, llevamos ya 24 años de funcionamiento como cooperativa.”
LCV: “Nacer en 2001 es como un signo complejo. Tiene que ver con la crisis y la resistencia. Llegar a 2025 en medio de otra crisis económica considerable, ¿cómo están manejando esta nueva etapa y cómo atravesaron los últimos 24 años?”
Carlos Galeano: “Lamentablemente, la situación actual es muy similar a la que vivimos entonces. Pero no nos quedamos con los productos que fabricaba la empresa fallida, sino que innovamos. En 2016, con un subsidio de Fuerza Solidaria, incorporamos una cortadora láser y una plegadora, lo que nos permitió lanzar nuevas líneas, como las campanas. Eso mejoró nuestros ingresos. Siempre tratamos de innovar. Mantener la cooperativa vigente depende en gran parte de eso: no quedarnos con lo mismo, sino buscar qué productos podemos fabricar e incrementar nuestro capital.”
LCV: “¿Ustedes exportan o trabajan solo en el mercado interno?”
Carlos Galeano: “Por el momento trabajamos en el mercado interno, con alcance nacional. Entregamos productos en todo el país.”
LCV: “¿A qué sectores proveen? ¿Industria, campo?”
Carlos Galeano: “Proveemos tanto a la industria como al hogar. Vendemos extractores de aire, purificadores y extractores de baño a casas de sanitarios en todo el país, especialmente en provincia de Buenos Aires y Capital Federal. En la línea industrial tenemos grandes clientes en provincias como Córdoba y Santa Fe.”
LCV: “¿Trabajan en conjunto con otras cooperativas?”
Carlos Galeano: “Hemos intentado proyectos conjuntos que aún están en carpeta, como el desarrollo de un calefactor solar. Fue una propuesta junto a FECOTRA, la Federación de Cooperativas de la provincia de Buenos Aires. La idea es que cada cooperativa aporte una parte del proceso. No es fácil, pero seguimos trabajando en ello.”
LCV: “Nombraste un tema fundamental: la innovación. Eso implica tecnología, pero también capacitación. ¿Cómo se manejan con estos temas? ¿Quiénes acercan los proyectos? ¿Hay jóvenes involucrados?”
Carlos Galeano: “Tratamos de incorporar gente nueva, jóvenes, a través de pasantías con la Escuela Técnica N°1 de Florencio Varela. También cada asociado puede proponer ideas en las asambleas. Observamos las necesidades del mercado y eso nos guía. Por ejemplo, recientemente lanzamos una línea de aberturas de aluminio, que surgió como una necesidad de abastecer ese mercado. Nos fue muy bien. La innovación surge tanto de los más jóvenes como de la experiencia acumulada. La clave es estar atentos a las necesidades del país y adaptar nuestra producción.”
LCV: “Qué cosa ser argentino, ¿no? Ya estamos formados con una maestría en crisis…”
Carlos Galeano: “Exacto. A veces digo: esta película ya la vimos. Pero ya no quiero verla más. Vivimos una situación de crueldad impresionante. Espacios como este, como el de las cooperativas, representan una esperanza. Juntarnos, hacer algo, demostrar que juntos se puede salir adelante. Y si no, al menos no estamos solos.”
LCV: “Coincido. El trabajo colectivo sigue siendo un motor de esperanza.”
Carlos Galeano: “Solos no logramos nada. En conjunto, podemos enfrentar situaciones tan complicadas como estas.”