fbpx
Connect with us

Destacada

La V Columna | Octubre y los sueños de Joselo

A esta altura, no sé si lo soñé o todo esto ocurrió. Un viaje lisérgico o un bautismo antes de iniciar octubre. No sé por qué, quizás por esa astróloga hija de los treinta mil de la que ya les hablé, me preparé para lograr ‘cambiar de piel’ (como las serpientes), todo debía ocurrir, esa volanteada del destino, en este mes. Así que no presté atención a los caprichos del calendario. Para mí, este año empezó en octubre y recomienza en octubre. No solo un año, una era, una etapa, una vida.

Ignoro cómo llegué allí en un momento tan complicado. Creo que desde octubre del año pasado estaba intentando cruzar el río, volver al lugar donde criamos a nuestros hijos. Nunca imaginé que atravesar las aguas sería tan difícil. Con media casa embalada, no suspendimos el compromiso. Casi un imperativo. Y fuimos a Puerto Pirámides, para una fantasmal feria del libro que no se realizó.

Es que la Nelly tenía ganas de volver a encontrar a los que hicieron una de las grandes jornadas del pueblo, el cambio de nombre de sus calles. La semana pasada había estado la Taty Almeyda vaya a saber uno con qué excusa. Bayer, era un fantasma que participó a su modo del encuentro. Y Hernán, mi hernán, supongo que ya lo sabés, el López Echagüe, fue invitado para la Feria que al final no se hizo, pero la invitación, con mujer y todo, seguía en pie, los pasajes estaban comprados.

En medio de estos encuentros imaginados, apareció Joselo Schuap. En sus 28 días de coma se la pasó soñando. O no. Todo era tan real que no podía creer que eso no hubiera sucedió. Porque hoy nos olvidamos de que el Covid mataba en serio, pero Joselo estuvo por lo menos un minuto muerto, y muchos días semimuerto. Un desvelo que lo llevó a soñar cosas increíbles, cuyos matices ya ni recuerdo, pero parecen un cuento de Wilckzec. De pronto vio que morían sus hijos. Y también perdía la vida, no sé si en un accidente de avión, la Nelly. Despertó del largo sueño, y se puso a charlar con un tornillo del techo, su único amigo permanente en la terapia. Puteó a puro gesto a una enfermera que lo maltrataba. Saber que sus hijos estaban vivos fue fácil, allí fueron apenas pudieron. Los chicos no rezaron por su recuperación, optaron por ensayar, sin respiro, tocar guitarra o caja. Sabían que eso le daba fuerza al padre.

¿Y Nelly? ¿También estaba viva? La buscó. Tardó unos días en saber que sí, porque la Nelly es de Puerto Pirámides y no está muy pendiente del celular. Finalmente se contactaron. Él quería verla, palpar que la vida era real. No era una amiga del alma, eso sonaba raro. La había conocido en Nueva Palmira, en la casa de Hernán López Echagüe en tiempos de una Asamblea Regional que defendía el agua, pero hizo agua, como correspondía. Cuando habla con Nelly, ella le comenta que el tal Lopechague tenía que ir a Puerto Pirámides. Imaginó que era una señal. Allí fue, con sus dos hijos resucitados, para abrazar a Nelly. Los chicos tenían que conocer a esa mujer, y a esa geografía femenina de la península de Valdez. Viajó toda la familia, por primera vez, con papá de gira, él, Graciela, su hermosa, sabia y paciente compañera, durante un día y medio, para quedarse jueves y viernes en Puerto Pirámides.

Cuando se habla de redes, entiendo que es ésto. Personas que se anudan sin otro motivo aparente que algún objetivo común y una simpatía mutua. Hernán enfermó de la emoción. Roberto, pudo hacer su exquisito cordero estacado, una deuda pendiente. Se sumaron a la red: Eugenia (la Ajo, directora de la Escuela), Verónica (profe de letras y descendiente de los Valladares de Tucumán, Leo, Diego, otros profes de la escuela, pero mucho más que eso, reporteros gráficos, medio músicos, medio libres. Extrañamos a Eduardo, el gran poeta y cantante del sur, que desde hace casi dos décadas trabaja en potabilizar el agua salada. Más poético que eso, nada. (‘No se calma la sed con agua salada’, dice Fandermole, pero parece que sí) Lo extrañamos a Eduardo. Cosas de pueblo, grietas que nada tienen que ver con la Gran Grieta.

El asunto es que allí estábamos: Nelly, Roberto Cabeda -que ya no era portero de la escuela sino Sec. Gral de ATE Madryn- Joselo y familia, con la hermosa Graciela, y los chicos: Julián y Andresito.

Joselo necesitaba hablar de su experiencia con la muerte por covid. Contaba sus sueños durante el coma. Y, en esas esquinas entrecruzadas de modo mágico, estaba yo, que venía de visitar por más de medio mes a mi hermana en coma, en Italia, poco antes de volver al país después del exilio.

Si hacía falta cerrar algún círculo para cambiar de piel, nos quedaba la visita a Patricia Valladares en un barrio en construcción cerca a Puerto Madryn: el doradillo. Creo que los muertos nos vinieron a visitar. Ella, tucumana, prima del Oveja Valladares, un hermano para Hernán, quien murió en el Aeropuerto de Carrasco, porque prefirió morir antes de ser secuestrado. En el mismo operativo caía otro tucumano: Miguel Angel Estrella.

Allí empezó otro viaje. Conocimos a Patricia y Guillermo. Ella de Tucumán, la tierra de mi madre y de mi abuela. Él, hijo de algunos de los fundadores de Madryn, familias de albañiles que venían a construir la estación de trenes del lugar. Trenes que tenían como fin Puerto Pirámides, por entonces el puerto más importante para exportar lana y carne conservada en los salares. Guillermo era nieto de María Ebene y Juan Meissen. Medio tano, alemán y con un padre libio. Hijo de los fundadores del lugar, no como conquistadores sino como habitantes pioneros. ‘Los dueños de estas tierras viven todos en Buenos Aires, aquí estamos los pobladores, los laburantes”. Su abuelo Juan era un anarquista de pura cepa. Todos lo recuerdan leyendo y leyendo. Por entonces era el lejano oeste, cada quien tenían su Winchester, tradición que duró en el tiempo. Gente ruda la que puede vivir en el desierto, en donde es más fácil encontrar petróleo que agua.

Para otro día quedarán todas esas historias contadas en una casa casi de muñecas. Toda blanca. Con el Guille, carpintero, hacedor de juguetes en medio del desierto.

Y si ya lo desmentí a Fandermole con el agua salada, voy por más. Dice Silvio Rodríguez: Perdonen por este día los muertos de mi felicidad. Los muertos siempre estarán felices por tu felicidad. Nada que perdonar. Nada de culpas.

No sé si lo viví o lo soñé, pero estoy segura que cambié de piel, como la serpiente. Y octubre me encuentra lista para un nuevo viaje.

Seguir leyendo
Comentá

Leave a Reply

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.

Destacada

Innovación, tecnología y cooperativismo: Cootech dijo presente en la Expo Cooperativa 2025

La cooperativa tecnológica Cootech participó por primera vez de la Expo Cooperativa 2025, realizada en el Teatro Argentino, donde presentó herramientas digitales orientadas al turismo, la gestión rural y la seguridad. En diálogo con La Columna Vertebral, Tatiana Aime detalló los productos exhibidos, el balance de la experiencia y destacó el fuerte perfil de género de la cooperativa.

LCV: La cooperativa estuvo presente, tuvo stand en la Expo Cooperativa 2025 del viernes pasado.
Tatiana Aime: “Sí, así es. Estuvimos en el Teatro Argentino donde se realizó la Expo Cooperativa 2025, la segunda edición, y esta fue la primera vez que nos presentamos mostrando algunos de nuestros productos.”

LCV: ¿Y cuáles son esos productos?
Tatiana Aime: “Los productos que llevamos al stand fueron tres en particular: uno es un software de digitalización de destinos turísticos que permite recorrer virtualmente zonas turísticas, como por ejemplo Berisso, Tapalqué y Carué, donde al ingresar a la página web de cada municipio se puede encontrar digitalizada toda su oferta turística.”

LCV: ¿Esto puede usarse desde el celular?
Tatiana Aime: “Sí, no es necesario ningún tipo de artefacto especial, con una computadora o un celular se puede visualizar perfectamente, lo que permite que cualquier persona que esté viajando por la provincia de Buenos Aires pueda consultar desde el teléfono qué hay para hacer en un destino determinado.”

LCV: Por ejemplo, si quiero ir un fin de semana largo a Carué, ¿la plataforma me muestra qué hay para hacer?
Tatiana Aime: “Exactamente, la página web te muestra los lugares turísticos y las actividades disponibles en Carué.”

LCV: ¿Cómo lo mostraron en el stand?, ¿era interactivo?
Tatiana Aime: “Sí, teníamos una pantalla donde se podía interactuar y recorrer los distintos lugares, y también presentamos realidad aumentada con visores, que permitían señalar y explorar los espacios de forma virtual.”

LCV: ¿Dijiste que presentaron más herramientas además de esta?
Tatiana Aime: “Sí, además presentamos dos herramientas más: una de gestión interna para campos y otra de seguridad rural que actualmente está siendo aplicada en el municipio de Salliqueló.”

LCV: Es la primera vez que participan en la Expo, ¿qué te pareció la experiencia y la interacción con la gente?
Tatiana Aime: “La experiencia fue muy buena, pudimos contactar a distintas cooperativas, charlar, mostrar lo que hacemos y tejer redes, que es algo fundamental dentro del cooperativismo.”

LCV: ¿Qué saldo dejó la Expo en términos de contactos y vínculos?
Tatiana Aime: “Pasaron muchas personas por el stand, pudimos mostrar nuestro trabajo y nos llevamos contactos con los que seguramente podremos hacer cosas a futuro, tanto con otras cooperativas como con usuarios directos.”

LCV: ¿Ustedes también desarrollan software a medida?
Tatiana Aime: “Sí, no solo hacemos los productos que mostramos en la Expo, sino que también desarrollamos software a medida según las necesidades de cada cliente, y este tipo de eventos permite vincularse directamente con quienes tienen una idea o una problemática concreta.”

LCV: Tatiana, sos muy joven, ¿cuántos años tenés?
Tatiana Aime: “Tengo 34 años.”

LCV: Quiero felicitarte porque es importante ver gente joven trabajando y construyendo estos proyectos colectivos.
Tatiana Aime: “Muchas gracias, y quiero destacar que Cotech está compuesta en un 90% por mujeres, algo que nos llena de orgullo, sobre todo teniendo en cuenta que desde el IPAC se viene planteando la equidad de género como un eje central para las cooperativas del próximo año.”

Continue Reading

Destacada

Paro de controladores aéreos por salarios atrasados y despidos sin resolver

En diálogo con La Columna Vertebral, Julián Gaday, integrante de la comisión directiva y vocero de la Asociación Técnicos y Empleados de Protección y Seguridad a la Navegación Aérea (ATEPSA), explicó cuál es la función de los controladores aéreos, el nivel de responsabilidad que implica su trabajo, las condiciones salariales del sector y los motivos del conflicto que derivó en medidas de fuerza anunciadas a partir del 17 de diciembre.

LCV: ¿Qué es un controlador aéreo?

Julián Gaday (ATEPSA):“Los controladores aéreos somos las personas encargadas de guiar y separar a todos los aviones desde que ponen en marcha los motores hasta que aterrizan en destino: despegue, aterrizaje, ascenso y nivel de crucero. Controlamos básicamente todo el espacio aéreo argentino, incluidos aviones del Estado, militares y comerciales; todo lo que vuele tiene que comunicarse con nosotros. Si no trabajamos, no hay tránsito aéreo, por eso somos un servicio público esencial y se nos hace tan difícil llegar a medidas de fuerza.”

LCV: Quiero poner en valor la responsabilidad que tienen: si se equivocan en una ruta, puede haber consecuencias gravísimas.

Julián Gaday:“Por supuesto. En el centro de control de área de Ezeiza, donde trabajo, controlamos en una hora normal entre 25 y 35 vuelos, y en horas pico hasta 50 aviones por hora. Estamos hablando de miles de vidas que pasan por nuestras voces, nuestras decisiones y nuestras instrucciones, no solo en ruta sino desde que el avión empieza a subir. Básicamente tomamos decisiones para evitar, de manera fundamental, que los aviones se choquen.”

LCV: ¿Cómo es el trabajo en equipo para que un avión esté en vuelo?

Julián Gaday:“ATEPSA representa a todos los trabajadores de los servicios de navegación aérea. Todo comienza en las oficinas ARO, donde se recibe la documentación y el plan de vuelo que presentan los pilotos o las aerolíneas, con la ruta y toda la información necesaria. Allí también se brinda información sobre estado de aerovías, aeropuertos y meteorología. Luego el avión llama a la torre de control, que autoriza la puesta en marcha, el rodaje y el despegue. Una vez en vuelo, pasa a los controladores de área, que controlamos todo el espacio aéreo desde cinco centros en el país, y al aproximarse al destino vuelve a pasar a la torre. También intervienen los servicios de búsqueda y salvamento y las oficinas NOTAM, que notifican cuestiones operativas a los pilotos.”

LCV: ¿Se estudia para ser controlador aéreo? ¿Cómo es la formación?

Julián Gaday:“Sí, se estudia. Hay un curso básico de un año y luego, según el destino, entre seis meses y más de un año para obtener la habilitación local. Yo, por ejemplo, trabajo en el centro de control de área y no puedo controlar en la torre de Ezeiza aunque esté a un piso de distancia, porque no tengo habilitación. Lo mismo sucede entre distintos aeropuertos: cada lugar tiene sus particularidades y son trabajos distintos.”

LCV: Con ese nivel de exigencia, ¿cuánto gana un controlador aéreo?

Julián Gaday:“Un controlador en Ezeiza o Aeroparque puede ganar alrededor de dos millones de pesos. En el interior del país, en aeropuertos con menor complejidad, los salarios rondan entre 1.300.000 y 1.800.000 pesos. En algunos de los cinco centros de control hay trabajadores por debajo de la línea de pobreza. Gran parte del colectivo tiene que hacer trabajos extra para mantener un nivel de vida mínimo que le permita realizar esta tarea, que es vocacional y crítica para la seguridad.”

LCV: ¿Cómo es el diálogo con la empresa y en qué consisten las medidas a partir del 17 de diciembre?

Julián Gaday: “El diálogo es prácticamente nulo. Hemos asistido a varias audiencias, pero es hablar contra una pared. No tenemos respuestas ni soluciones, desconocen el conflicto, los motivos y hasta el convenio colectivo de trabajo. En la última audiencia nos pidieron cinco días más para analizar propuestas que presentamos el 9 de septiembre. Pasaron tres meses sin analizarlas. Reclamamos actualización de viáticos con más de un año de atraso, revisión de categorías de aeropuertos —que por convenio debe hacerse anualmente— y la reincorporación de nueve controladores despedidos ilegalmente. Solo reincorporaron a tres; los otros seis siguen esperando, sin ninguna justificación válida.”

Imagen
Cronograma de medidas de fuerza de los controladores aéreos.

LCV: ¿Están informando para que los pasajeros no se vean sorprendidos?

Julián Gaday: “Notificamos a la empresa hace diez días del cronograma de medidas. Como servicio público esencial, debemos garantizar al menos el 45% de las operaciones, y nuestras medidas afectan alrededor del 10%. Informamos por mail a todas las compañías aéreas para que reprogramen vuelos y avisen con anticipación a los pasajeros. Nuestros usuarios directos son las aerolíneas, no los pasajeros.”

LCV: Se cuestiona que las medidas coincidan con fechas sensibles como Navidad.

Julián Gaday: “Durante todo noviembre hicimos medidas de fuerza sin afectar pasajeros, parando solo vuelos de carga. No tuvimos ninguna respuesta. Recién cuando se afecta al pasajero aparece el conflicto en agenda. Por eso es importante decir que no somos los únicos responsables: del otro lado están la empresa y el Estado, que no negocian ni ofrecen lo mínimo indispensable para llegar a un acuerdo.”

Continue Reading

Destacada

Acerca del imperio de lo inaudito y la apatía, por Hernán López Echagüe

Todo ocurre a cada instante, de modo cruel, y, en ocasiones, espeluznante. La vida se ha convertido en una suerte de encadenamiento de pasos dominados por la inviabilidad de llevarla a cabo. Un vagabundeo desprovisto de mira. Basta con echarle un poco de ojo a los acontecimientos que nos rodean, y nos sumergen, sin pausa, en un estado de las cosas en el que predominan el oscurantismo, la persecución, la barbarie, y el espíritu de la irracionalidad más abyecta. Sin embargo, lo que más pesadumbre causa es el silencio, y la quietud, y el desmembramiento de las voces y los actos de los que, al parecer, a los gritos y gesticulaciones por momentos dignas de conmiseración, condenan el oscurantismo, la persecución, la ignorancia y la irracionalidad. Y, al final de cuentas, no hacen más que brindarle mayor magnitud al descalabro, y, en ocasiones, fundamento. Triste victoria del vacío. ¿Qué decir? ¿Qué escribir?

Mejor lo ha dicho y escrito Julio Cortázar en su artículo “Policrítica a la hora de los chacales”, en 1971. Medio siglo atrás:

“De qué sirve escribir la buena prosa, de qué vale que exponga razones y argumentos si los chacales velan, la manada se tira contra el verbo, lo mutilan, le sacan lo que quieren, dejan de lado el resto, vuelven lo blanco negro, el signo más se cambia en signo menos, los chacales son sabios en los teles, son las tijeras de la infamia y del malentendido, manada universal, blancos negros, albinos, lacayos si no firman y todavía más chacales cuando firman, de qué sirve escribir midiendo cada frase, de qué sirve pesar cada acción, cada gesto que expliquen la conducta, si al otro día los periódicos, los consejeros, las agencias, los policías disfrazados, los asesores del gorila, los abogados de los trusts se encargarán de la versión más adecuada para consumo de inocentes o de crápulas, fabricarán una vez más la mentira que corre, la duda que se instala, y tanta buena gente en tanto pueblo y tanto campo de tanta tierra nuestra, que abre su diario y busca su verdad y se encuentra con la mentira maquillada, los bocados a punto, y va tragando baba prefabricada, mierda en pulcras columnas, y hay quien cree y al creer olvida el resto, tantos años de amor y de combate, porque así es, compadre, los chacales lo saben; la memoria es falible y como en los contratos, como en los testamentos, el diario de hoy con sus noticias invalida todo lo precedente, hunde el pasado en la basura de un presente traficado y mentido.Entonces no, mejor ser lo que se es, decir eso que quema la lengua y el estómago, siempre habrá quien entienda este lenguaje que del fondo viene, como del fondo brotan el semen, la leche, las espigas.Y el que espera otra cosa, la defensa o la fina explicación, la reincidencia o el escape, nada más fácil que comprar el diario made in usa, y leer los comentarios a este texto, las versiones de Reuter o de la UPI donde los chacales sabihondos le darán la versión satisfactoria, donde editorialistas mexicanos o brasileños o argentinos traducirán para él, con tanta generosidad, las instrucciones del chacal con sede en Washington, las pondrán en correcto castellano, mezcladas con saliva nacional, con mierda autóctona, fácil de tragar.No me excuso de nada, y sobre todo no excuso este lenguaje, es la hora del chacal, de los chacales y de sus obedientes: los mando a todos a la reputa madre que los parió, y digo lo que vivo y lo que siento y lo que sufro y lo que espero. Sólo así podremos acabar un día con los chacales y las hienas”.

Ilustración: Silvia Flichman (https://silviaflichman.com.ar/ )

Continue Reading
Advertisement

Facebook

Copyright © 2017 Zox News Theme. Theme by MVP Themes, powered by WordPress.