fbpx
Connect with us

Destacada

Perú: Las intuiciones del marxista Mariátegui, por Paul Guillibert

9 de febrero de 2023/ Publicado en estrategia.la

Para algunos, la clase constituye el elemento determinante de todas las relaciones de dominación. Para otros, las formas contemporáneas de racismo son el resultado de una cultura, es decir, de representaciones por las cuales una comunidad define su identidad y el individuo su pertenencia al grupo.

La mayoría de las veces, el debate reactiva una controversia estéril que enfrenta a los partidarios de un “enfoque económico” y a los partidarios de un “enfoque cultural”, como si la noción de clase incumbiera en exclusiva al universo económico y la de raza a la esfera cultural.

Este debate omite a menudo la historia del marxismo en contexto colonial. Entre los pensadores que han estudiado las condiciones económicas de la dominación racial y las condiciones culturales de la dominación de clase, se destaca una de las figuras revolucionarias más importantes del continente sudamericano: José Carlos Mariátegui (1894-1930) [1].

En su obra más acabada, Siete ensayos de interpretación de la realidad peruana, publicada en 1928, Mariátegui elabora su intuición fundamental: en los países antiguamente colonizados de América Latina la comprensión de la historia en términos de lucha de clases debe atender a la especificidad de las sociedades campesinas e indígenas. Desde un punto de vista general, anuncia entonces un gran movimiento de traducción y de adaptación del marxismo a los mundos no europeos en vías de descolonización que encontraremos con otras modalidades en los años 1950-1960 en Frantz Fanon, Amílcar Cabral u Ho Chi Minh, por ejemplo.

Fundador del Partido Socialista obrero y campesino en 1928, y luego del Partido Comunista Peruano (PCP) en 1930, Mariátegui rechaza todo análisis sociológico de la joven república que prescinda del hecho colonial. La colonización produjo una sociedad donde las jerarquías raciales entre blancos, criollos, indios y negros determinan las posiciones de clase. Para el revolucionario peruano, el racismo postcolonial no es entonces un problema moral (como lo sugieren las tradiciones humanitarias o filantrópicas), sino político: el de la distribución de la propiedad.

“No nos contentamos con reivindicar el derecho del indio a la educación, a la cultura, al progreso, al amor y al cielo. Comenzamos por reivindicar, categóricamente, su derecho a la tierra. Esta reivindicación perfectamente materialista debería bastar para que no se nos confundiese con los herederos o repetidores del gran fraile español [Bartolomé de Las Casas], a quien, de otra parte, tanto materialismo no nos impide estimar fervorosamente” [2].

Los negros –esclavos provenientes de la trata– se extenúan en las minas, los indios oprimidos se agotan en las grandes propiedades (latifundios), los blancos y los criollos dirigen las instituciones del poder y del comercio. Para Mariátegui, la relación con la tierra y la división del trabajo son las que condicionan la posición en las jerarquías raciales y las que explican por qué los indios quechuas o aymaras ven en el mestizo y en el blanco la figura del opresor. Mariátegui busca demostrar, a la vez, contra los liberales y los católicos, la dimensión económica del imperialismo y, en contra de la visión dominante en el seno de la Internacional Comunista, que el racismo antiindígena no podrá resolverse en el seno de repúblicas independientes y racialmente homogéneas.

En su discurso en el Primer Congreso de la Internacional Comunista en América Latina en 1929, titulado “El problema de las razas en América Latina”, Mariátegui escribe que “entre el ‘señor’ o el burgués criollo y sus peones de color no hay nada de común. La solidaridad de clase se suma a la solidaridad de raza (y de prejuicio) para hacer de las burguesías nacionales instrumentos dóciles del imperialismo yanqui o británico” [3].

El camino del inca

Por un lado, Mariátegui subraya el rol determinante de las jerarquías raciales en la pertenencia de clase; por el otro, considera que estas son producidas por relaciones de propiedad, es decir, que tienen un fundamento económico (y no solamente cultural) que favorece el desarrollo del imperialismo estadounidense. Es el acceso y el control de los medios de subsistencia, empezando por la tierra, lo que garantiza la reproducción del poder blanco e imperialista. Esta lectura económica del racismo condujo a una estrategia revolucionaria y anticolonial: las recuperaciones de tierra.

“Es lógico afirmar que sus reivindicaciones naturales [las de los indígenas] consisten en exigir la devolución de toda la tierra que puedan cultivar” [4]. Mariátegui se muestra mesurado: menciona la devolución solamente de las tierras que los indios tienen la capacidad de cultivar. La revolución agraria supone entonces una transición política que transfiera poco a poco la propiedad a los indios adaptándose a sus necesidades y a sus medios. Si bien habla de una “devolución de las tierras”, la política comunista que él defiende no tiene como ambición copiar de forma idéntica la existencia de una comunidad originaria. Por el contrario, la reapropiación colectiva de una tierra que provee los medios de subsistencia de la comunidad supone reinventar una forma antigua en una sociedad de un tipo nuevo.

Basada en una red de ayllus (un término quechua que se refiere a comunidades rurales colectivizadas), la tierra debe proveer los medios para liberarse de la dependencia política de la burguesía colonial y de la dependencia económica respecto del mercado. Aquellas y aquellos que no dependen de ningún amo para su subsistencia pueden decidir libremente sobre su futuro político. Reapropiarse de la tierra no es solo darse los medios de subsistencia material, es también ganar autonomía política respecto del poder blanco y capitalista.

Mito de base

Mariátegui agrega que la transformación política del mundo económico exige una adhesión a mitos revolucionarios. Al contrario de la idea llamada “científica”, según la cual el comunismo habría roto con el utopismo de los primeros pensamientos socialistas, el pensador peruano considera que toda revolución supone una forma de fe. Se trata a la vez de una tesis general sobre la historia de los pueblos y de un intento de dar a la política peruana su mito fundador: el “comunismo inca”.

Para el intelectual peruano, el concepto designa la existencia de un comunismo precolonial organizado según una estructura jerárquica: las comunas agrarias rurales basadas en una repartición de la tierra y en la ausencia de propiedad privada son coordinadas por el Inca Supremo y por el poder religioso, que recaudan impuestos y tributos para asegurar cierto número de grandes obras, en particular de irrigación. La mayor parte de los comentaristas y de los historiadores han criticado el carácter anacrónico de la calificación de comunismo para una sociedad donde una parte de la riqueza producida por los campesinos es extraída por una clase política y religiosa, sea por intermedio del impuesto, sea por un sistema de servidumbre. Dado que efectivamente parece existir en el seno del Imperio inca una clase explotadora y una clase explotada, ¿cómo ver allí una forma de comunismo?

Por empezar, los ayllus son un régimen de propiedad de la tierra en el que las tierras comunales son repartidas de manera periódica entre cada familia, pero explotadas de forma colectiva. Para Mariátegui, esta estructura social es testimonio de un “comunismo indígena”, incluso de una “mentalidad comunista”, que se inscribe en la tradición comunitaria de una tierra sin propietario privado y explotada de modo colectivo. Pero su tesis resulta más provocadora aun cuando sostiene que el gobierno autoritario de los incas constituía la única forma de comunismo conveniente para esta época y esta sociedad.

Podríamos, es evidente, ver allí una justificación del estalinismo en vías de constituirse en Rusia. Pero Mariátegui defiende en realidad una forma de “relativismo histórico” [5]: no existiría un modelo político del comunismo; el término se referiría solo a una organización de las relaciones sociales basada en la ausencia de propiedad privada, pero que podría presentarse según una multiplicidad de formas de gobierno.

Marxismo postcolonial

El rechazo de un modelo histórico único permite criticar las visiones etnocentristas de la historia, transmitidas en particular por la Internacional Comunista en América Latina (y según la cual los grupos sociales llamados “atrasados” deberían seguir la vía de los grupos avanzados). Es imposible “consustanciar la idea abstracta de la libertad con las imágenes concretas de una libertad con gorro frigio –hija del protestantismo y del Renacimiento y de la Revolución francesa–”, añade. Para Mariátegui, la idea de libertad humana no se resume en su manifestación europea moderna, basada en los derechos humanos burgueses y su iconografía. Se expresa en singularidades concretas.

Las formas de gobierno emergen de las sociedades que las han visto nacer. Es también la razón por la cual el comunismo moderno no puede desarrollarse sin tener en cuenta esta característica de la época que es el individualismo liberal y el derecho de los sujetos a hacer reconocer su particularidad.

Pero hacen falta mitos, incluso religiosos, para suscitar la reflexión y movilizar. Para él, el mito se refiere a la dimensión afectiva de representaciones, cuya fuerza es capaz de transformar la conciencia. Es en este punto que la distancia con el marxismo ortodoxo es la más importante. Para el socialista andino, la religión moderna es la institución que se hizo cargo de la fuerza afectiva de los mitos antiguos. La crítica de las religiones en sí es una “diversión burguesa y liberal” [6], porque “la fuerza de los revolucionarios no está en su ciencia; está en su fe, en su pasión, en su voluntad. Es una fuerza religiosa, mística, espiritual” [7]. La convicción según la cual la revolución debe ser fundada sobre el mito hace de él uno de los precursores de la teología de la liberación, que confiere a la fe cristiana una fuerza emancipadora contra la modernidad capitalista.

Durante todo el siglo XX, las luchas anticoloniales y antirracistas han renovado las categorías marxistas para pensar las relaciones entre clase y raza. En 1944, en Capitalismo y esclavitud, Eric Williams, pensador marxista de Trinidad y Tobago, citaba por ejemplo esta frase de un cronista inglés: “Ni un solo ladrillo de la ciudad de Bristol fue fabricado sin la sangre de un esclavo”. El debate entre clase y raza –que se empobrece generalmente en una controversia sobre la economía o la cultura– pasa por alto toda la historia del “marxismo negro” y del “marxismo postcolonial”, desde José Carlos Mariátegui hasta C.L.R. James, desde Eric Williams hasta Cedric Robinson.

Todos, a su manera, demuestran que el marxismo debe renovarse para existir políticamente: “No queremos, ciertamente, que el socialismo sea en América calco y copia. Debe ser creación heroica. Tenemos que dar vida, con nuestra propia realidad, en nuestro propio lenguaje, al socialismo indoamericano” [8].

Paul Guillibert*Doctor en Filosofía, autor de Terre et capital. Pour un communisme du vivant,

Referencias:

1       véase, en particular, Michaël Löwy, “L’indigénisme marxiste de José Carlos Mariátegui”, Actuel Marx, París, Vol. 2, Nro. 56, 2014.

2       José Carlos Mariátegui, Siete ensayos de interpretación de la realidad peruana, múltiples ediciones.

3       José Carlos Mariátegui, “El problema de las razas en la América Latina”, en Ideología y política. Biblioteca Amauta. Ediciones populares de las Obras completas de José Carlos Mariátegui, Lima, Amauta, 1969.

4       Ibídem.

5       José Carlos Mariátegui, Siete ensayos de interpretación de la realidad peruana, Op. cit.

6       Ibídem.

7       José Carlos Mariátegui, “El hombre y el mito”, en El alma matinal y otras estaciones del hombre de hoy. Biblioteca Amauta. Ediciones populares de las Obras completas de José Carlos Mariátegui, Lima, Amauta, 1969.

8       José Carlos Mariátegui, “Aniversario y Balance” (1928), Op. cit.

Este artículo fue publicado en estrategia.la

Seguir leyendo
Comentá

Leave a Reply

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.

Destacada

Santiago Seillant: “No es opción quedarse resignado con los brazos cruzados”.

En un contexto político tenso y atravesado por fuertes cuestionamientos a la clase dirigente tradicional, un nuevo frente político se abre paso en la provincia de Jujuy. Santiago Seillant, dirigente sindical y referente del espacio Siendo Trayectoria, conversó con LCV sobre la construcción de una alternativa que busca romper con el modelo de acumulación feudal que, según denuncia, domina la política local.

El frente, conformado por sindicatos, organizaciones sociales, comunidades originarias, espacios universitarios y sectores del peronismo desencantados, propone un modelo amplio y heterogéneo que desafía tanto al oficialismo provincial como a las lógicas electorales tradicionales. En esta entrevista, Seillant aborda desde las trabas que impone el sistema electoral hasta las estrategias de unidad popular, pasando por el fenómeno del voto bronca y las expectativas de una transformación real en la provincia.

LCV: ¿Cómo lograron crear un frente por un nuevo Jujuy? Que esa es una experiencia compleja siempre, el frentismo. ¿Y quiénes lo componen?

Santiago Seillant: “Estamos compuestos, nuestro partido se llama Siendo Trayectoria, que es producto de lo que fue el rechazo a la reforma constitucional del 2023, porque está conformado por sectores sindicales municipales —que es el nuestro—, docentes de ATE, de CTA, algunos sectores, desprendimientos de organizaciones sociales del Frente Popular Darío Santillán, productores rurales del Movimiento Nacional Campesino Indígena…

O sea, nuestro partido ya de por sí es novedoso, porque hay sectores del peronismo que están fuera del justicialismo, cansados de la estructura justicialista local que es muy feudal y, digamos, que ha participado de todos los gobiernos conservadores. Acá en la provincia de Jujuy ha habido gobiernos justicialistas, pero son todos conservadores, ¿no?

Y después hemos armado un frente con un partido indigenista, el Movimiento Comunitario Pluricultural, que está conformado directamente —es un partido indigenista, uno de los pocos del país—, que tiene comunidades originarias más fundamentalmente en la Quebrada y la Puna. Y con el viejo Partido del Trabajo y del Pueblo, el PTP, que… hay compañeros docentes, organizaciones…

Y después también hay un conglomerado de espacios, desde agrupaciones gauchas hasta docentes universitarios, que conforman nuestro frente. Realmente, bueno, hay sectores que tienen que ver con derechos humanos, con derechos de mujeres, diversidades… o sea, hemos conformado un frente muy amplio que tiene que ver con… o sea, no hay una extracción ideológica doctrinaria única, pero nos alienta, primero, el rechazo a la estructura, a la manera de hacer política y a la vieja estructura política, ¿no?

Sectaria, para los negocios, digamos, ¿no? Esa política que está estructurada en usar al Estado para… prevendario, prevendario, prevendario. Entonces, para nosotros es un gran desafío porque todo el sistema electoral, incluso acá en Jujuy, está hecho a medida de esa política prevendaria. Ya el que puede participar con posibilidades de éxito tiene que disponer de un capital de 1500 millones de pesos, más o menos. Y además hay un piso proscriptivo. Existe acá una limitación.”

LCV: Sí, eso te iba a consultar justamente. El sistema electoral provincial es bastante restrictivo, ¿no? A ver, descríbilo.

Santiago Seillant: “Claro, porque te obliga a tener el 5% de los votos del padrón para repartir los cargos. Si vos no sumás el 5% en cada categoría —concejales, diputados—, no entrás al sistema. Eso es otra trampa. Es el piso proscriptivo, el piso electoral más alto del país. Y está en el podio en el mundo, porque hay dos países en África… en el mundo hay dos países, dos países en África y después está Jujuy.

Lo que estamos haciendo, una campaña… realmente, a ver, a pesar de todas las dificultades, nuestro espacio está generando una expectativa muy grande, muy linda. Estamos ilusionados, contentos, porque realmente no dependemos de… acá, toda la política, acá hay once frentes electorales que muchos son armados por la vieja política para dividir votos.

Acá la estrategia es: cuanto más colectoras y frentes electorales, mejor, porque como dividen voto sirve para que no lleguen al piso, digamos, ¿no? O sea, la estrategia es dividir al máximo el voto para que solamente dos fuerzas se disputen la mayoría de los cargos. Dos o tres fuerzas, a lo sumo, que es donde ellos… les favorece la mecánica política, porque tienen que negociar con menos sectores toda la sumatoria de negocios que tienen.”

LCV: ¿Ustedes creen que pueden llegar a dar un batacazo tipo Vilca?

Santiago Seillant: “Mirá, yo creo que acá lo que siempre… acá en Jujuy, hay… creo que no sé si se da en el resto del país… hay un abstencionismo, un voto en blanco y un voto nulo de cerca del 17%.”

LCV: ¿Cuál es la lectura de ese abstencionismo y del voto blanco?

Santiago Seillant:“Y que hay un hastío de la política tradicional que en su momento se volcó para el FIT, porque llegó a tener hasta 20 y pico por ciento… nunca el FIT sacó un porcentaje tan alto como acá en Jujuy. A Milei, ¿no? Porque parte del castigo con Morales y el castigo a la vieja política se volcó en Milei. El voto a Milei en gran medida lo interpretamos como un voto bronca. No es un voto que tiene que ver con el libre mercado, con el anarcocapitalismo, no es un voto teórico. Claro. Tiene que ver con un voto bronca.

Y Milei está causando una defraudación grande, pero todavía el voto bronca va a seguir. O sea, el voto bronca, como en Milei no encontró una solución, va a buscar otra solución. Va a estar presente. Lo que hay que alentar es que… es la participación, porque como el piso electoral es sobre todo el padrón, cuanto más abstencionismo haya y voto nulo, menos es la cantidad de votos…

O sea, son 600.000 votos los del padrón, 598.000. Sobre eso es el 5%. Si van a votar 450.000, sigue siendo el 5% de 600.000, digamos, 598.000, ¿no? Los votos efectivos. Entonces, cuanto menos voto haya, también más se favorece que no superen al piso los grupos concentrados.

Han hecho una ingeniería para conservar el poder los sectores más poderosos. Pero esto es evidente. Pero a pesar de eso, nosotros dijimos: ‘Bueno, no es opción resignarse y quedarse de brazos cruzados’.”

LCV: Hay una voz de optimismo, ¿sabés? Yo te escucho y también me haces acordar cuando apareció el otro fenómeno en Santa Fe, Monteverde, que ahora también hizo una muy buena elección en Santa Fe… Ciudad Futura. Bueno, me hacés acordar a cuando uno lo empezaba a escuchar a Monteverde y había esa cosa de “vamos, vamos a poder, allá estamos”, y qué sé yo… y nosotros, la utopía puesta en sangre, ¿no?

Santiago Seillant: “La construcción que hacemos… aparte, nosotros sabemos que vamos a gobernar la provincia. Vamos a hacer gobierno. No sé, yo no sé si voy a ser yo el que encabeza, pero vamos a hacer gobierno. Vamos a entrar a la legislatura. Y además, porque, a ver, hay un tema: acá hay una calidad humana y dirigencial enorme en los barrios, en las estructuras sindicales, sociales, en los comedores, en los ámbitos comunitarios, territoriales.

Pero muchos de esos dirigentes cuando llegan las elecciones se guardan. ¿Por qué? Porque la lógica electoral los apabulla. O tienen un descreimiento a lo electoral o… bueno, también irrumpen en ese terreno una cantidad de… animales políticos que son… con todo, bueno, no hay que decir lo que son: buscan el dinero, digamos.

Yo creo que si todos esos dirigentes —una gran parte— se animaría, estarían. Ya se van a animar. Eso es lo que me refiero. Vamos a lograrlo. A romper con lo estructurado.”

LCV: ¿Cuáles son los acuerdos básicos que quieren para Jujuy, que quieren llevar a la legislatura?

Santiago Seillant:“Otro punto es que, bueno, ahora estamos justamente con un planteo de congelamiento tarifario ante la devaluación. Congelamiento de tasas municipales, tarifas. Estamos hoy —ahora yo estoy a punto de llegar a una reunión— en una juntada de firmas para una ley por iniciativa popular para el congelamiento tarifario de servicios públicos y de tasas municipales y de impuestos, hasta tanto se suban los salarios.

Y además, nuestro planteo es de auditoría. Acá los libertarios, fundamentalmente, plantean que hay que achicar, hay que auditar al Estado. Nosotros planteamos que sí hay que auditar al Estado en relación, fundamentalmente, con la licitación de obra pública. Pero también hay que auditar a las empresas. Hay que auditar a las empresas de servicio público. Hay que auditar a las mineras.

O sea, de esa parte los libertarios se olvidan, ¿no? Porque endiosan a las empresas como si fueran que no tienen ningún tipo de responsabilidad pública. Acá los libertarios no dicen nada de las empresas públicas de energía, de las empresas que tienen licitación en obra pública, porque acá todos se conocen y todos son socios: los libertarios, el PJ… tanto con el negocio de la basura, de la salud…

Y después está el negocio de las grandes mineras, que hoy están declarando plata, plomo y zinc en Rinconada, por ejemplo, y sacan oro gratis. Que tenés un régimen de regalías… Nosotros tenemos otra propuesta de régimen de regalías, que esto es aplicable a nivel nacional. Nosotros creemos que hay que volver al régimen dominial, en el cual el Estado podía explotar, en el cual el Estado podía darle a una cooperativa para la explotación minera.

Lógicamente, entendiendo que tiene que haber una evaluación de la consulta previa, libre, informada y una evaluación ambiental y de conveniencia de explotación por el deterioro ambiental. Pero el régimen que hay hoy, que es regalista —que básicamente te deja a las empresas transnacionales hacer lo que quieran— hay que volver al otro régimen.”

LCV: Vino el secretario de Estado que en este momento está dando una conferencia de prensa… está dando… disculpá, creo que grabaron con Milei y es muy impresionante ver la Casa Rosada, la bandera de fondo, el señor, el escudo estadounidense, la banderita estadounidense…

Santiago Seillant: “Bueno, nosotros acá tenemos la bandera nacional como emblema, pero también la wiphala. Nuestro sentir nacional es con los pueblos adentro: con los pueblos criollos y con los pueblos originarios. No hay una… son complementarias esas banderas, porque hablan del territorio.

Acá nosotros tenemos zona de frontera, limitamos con Chile y con Bolivia, son países hermanos, creemos en la Patria Grande, pero entendemos que el sentir nacional hay que recuperarlo y que no se lo apropien los sectores conservadores que son xenófobos, que entienden la patria como un lugar reservado solo para un grupo poblacional de clase media o clase alta y blanco, europeo, sino que no es solo eso. La patria es… la patria son los pueblos criollos. La patria somos todos. La patria somos todos. Todos. Todos.

Pero eso sí lo tenemos en claro nosotros. Acá incluso los pueblos originarios dicen: ‘No, nosotros queremos… entendemos que es pluricultural el país’ y plantean incluso desde un conglomerado de naciones. Hay ahí una discusión pendiente, pero que es apasionante realmente y es parte de nuestro espacio político.”

LCV: ¿Cuándo son las elecciones?

Santiago Seillant: “Son el 11 de mayo. 11 de mayo.”

Continue Reading

Destacada

Metalúrgicos ayer y hoy. Anuncian plan de lucha y reclaman por la Causa El Villazo

El Congreso Nacional de Delegados, reunido en la ciudad de Mar del Plata,  del que participaron 50 seccionales de la UOM de todo el país, anunció un plan de lucha que consiste en diez días de asambleas, un paro nacional seguida de paros progresivos de 48 y 72 horas en caso de no tener respuestas.  

En la seccional de San Nicolás  este lunes comenzaron las asambleas informativas de las distintas plantas fabriles para debatir con los trabajadores sobre el alcance del plan de lucha y fortalecer el reclamo desde las bases. Más allá del retraso salarial, el secretario general de la UOM, Abel Furlán, advirtió sobre la gravedad de la situación que atraviesa el sector: “Ya perdimos 22.000 puestos de trabajo y están en riesgo entre 30.000 y 50.000 más por la apertura indiscriminada de importaciones. Nos quieren imponer condiciones que no tienen relación con la realidad económica que estamos viviendo”, explicó.

Causa Villazo: “Seguimos reclamando que los alegatos y el veredicto se den en Villa Constitución”

Entre tanto, a 51 años del levantamiento obrero de Villa Constitución, en marzo de 1974, en la etapa final de la investigación de la causa judicial sobre los crímenes cometidos para reprimir el alzamiento obrero aplicando el llamado Operativo Serpiente Roja del Paraná y con la complicidad de Acindar, hubo un reconocimiento del lugar de los sobrevivientes del lugar donde se realizaron las detenciones ilegales y torturas en el predio de esa empresa. Se trata del conocido “Albergue de solteros”, uno de los primeros Centros Clandestinos de Detención que funcionaron en nuestro país, posteriormente destruido por la empresa. Allí mantuvieron cautivas y cautivos bajo tormentos a obreros metalúrgicos de la Lista Marrón y a quienes habían organizado la solidaridad de la lucha por la democracia sindical, por condiciones dignas de trabajo y de salud.

Marcelo Cortés, Secretario General de la CTA Autónoma Villa Constitución, relató que “los compañeros que ingresaron pudieron ubicar bien las instalaciones que ya no existen y además se sumó un señor que vivió en el barrio y pudo clarificar cada lugar”.

Mientras se llevaba adelante esta medida, en el portón del ex ingreso a la planta organizaciones de derechos humanos, sindicales y políticas realizaron un acto para apoyar a los testigos. “Hubo muchos gremios y público general que acompañó. Hay que continuar con fuerza porque seguimos reclamando que los alegatos y el veredicto se den en Villa Constitución”, concluyó.

Continue Reading

Destacada

Pablo Flores: “Los trabajadores del ARCA no vamos a aceptar mansamente el ajuste de nuestros salarios”

El secretario general nacional de AEFIP, Pablo Flores, expone las razones detrás de las recientes medidas de fuerza llevadas adelante por los empleados estatales, que incluyen apagones y protestas frente a las principales centrales del ARCA. En un contexto de profundos reclamos por la pérdida de poder adquisitivo y el desmantelamiento de los organismos públicos, Flores nos comparte su perspectiva sobre la situación salarial, el impacto de las políticas del gobierno, la movilización de los trabajadores y la inminente realización de un paro general.

A su vez, aborda también las dificultades económicas que atraviesa el país y la creciente tensión social, que se ve reflejada en la falta de respuestas a los derechos laborales y las necesidades de los trabajadores.

LCV: “Ustedes están llevando adelante medidas de fuerza, apagones, protestas en las puertas de las centrales más importantes del ARCA, eh, por lo que están padeciendo ustedes como empleados estatales impositivos. Contanos un poco, porque sé que la última arremetida fuerte fue este 31 con la pérdida de una gran cantidad de trabajadores que tomaron el retiro, ese retiro voluntario casi forzoso, ¿no?”

Pablo Flores: “Sí, la verdad es que venimos con varios temas. Hoy estamos discutiendo la cuestión salarial. Nosotros tenemos congelado el salario desde febrero del año pasado, sabiendo que nosotros tenemos compuesto nuestro sueldo por un porcentaje de la recaudación. Ese porcentaje también fue disminuido dos veces, la alícuota de apropiación, durante el año pasado, una vez en junio, otra en enero. Y nada, estamos pretendiendo discutir una recomposición salarial, porque ya el ajuste es intolerable. Entonces eso hace que los crímenes informáticos generen un conflicto que va a seguir creciendo. Bueno, sumado a este desmantelamiento del organismo, que se da en parte con jubilaciones y retiros voluntarios, que muchos son, digamos, por miedo a perder derechos futuros, ¿no? Entonces, eh, me parece que la política del gobierno es bastante agresiva como para que nos quedemos de brazos cruzados.”

LCV: “Además, está esa agresividad. Por fin está empezando a tomar algún tipo de forma la respuesta, y esto tiene que ver con la movilización del miércoles y con el paro, eh, que está tomando forma para este jueves. ¿Cuál es tu opinión? ¿Cómo ves vos la adhesión? ¿Creés que va a ser importante? ¿Qué va a pasar con el tema de los transportes?”

Pablo Flores: “Yo creo que la movilización, eh, es acompañar a los jubilados después de la brutal represión. Los jubilados vienen organizándose, manifestando su reclamo legítimo a una jubilación digna. Son trabajadores que han aportado años de trabajo, no están haciendo otra cosa que reclamar su salario diferido, por el cual ya aportaron décadas de trabajo. Entonces, acompañarlos después de esa brutal represión y seguir, digamos, y acompañar ese legítimo reclamo es más que una obligación de la Confederación General del Trabajo. Bueno, me parece que la movilización empieza a ser un reclamo que va a ser permanente y, bueno, a esto le sigue el paro general por falta de discusiones paritarias. No se homologan los acuerdos, no hay, eh, no hay, digamos, discusiones salariales que acompañen la inflación, están muy por debajo del nivel de inflación, y un montón de situaciones de pérdida de puestos de trabajo. Bueno, hay infinidad de situaciones que hacen al mundo laboral, que hacen que este paro general empiece a tomar cuerpo. Yo creo que la gran mayoría de los trabajadores va a adherir a esta medida de fuerza.”

LCV: “El paro, o los apagones, o el tema del desmantelamiento de las capacidades operativas de los empleados, y el aporte intelectual que hacen, o sea, empleados preparados que son despedidos, o que, o que son suspendidos, o que tienen el retiro voluntario en el marco de los trabajadores impositivos y de los trabajadores de aduana, ¿cuál es el impacto que tiene en la vida de los ciudadanos?”

Pablo Flores: “Yo creo que en la vida general de los contribuyentes empieza a ralentizarse, eh, la atención en general. Lo que están expresando los trabajadores es una disconformidad total con la política, tanto la salarial como la del conjunto de sus derechos. Y esto va a afectar, sobre todo, en definitiva, a la recaudación nacional. La recaudación nacional sostiene todos los servicios que da el Estado, así que no es un tema menor. No solo quizás es una cosa inmediata, de si no atendemos durante 3 horas, hay un, eh, un contribuyente que no puede hacer un trámite. Me parece que, en la medida en que el gobierno no atienda los reclamos de los trabajadores, esto va a terminar afectando a la recaudación nacional, porque los trabajadores no vamos a aceptar mansamente ni los brutales ajustes ni la crítica de derechos.”

LCV: “En el marco de estas medidas económicas y de este lunes negro que está viviendo el mundo completo, y por supuesto está pegando el coletazo acá, y en tanto las medidas de Milei parecen ir en contramano con las medidas del mundo, ¿esta, esta, este problema recaudatorio se agudiza?”

Pablo Flores: “Yo creo que sí, porque el gobierno, digamos, no define un plan económico serio ni, ni siquiera es un plan económico que se pueda entender y que se pueda analizar como un plan económico. Me parece que son una serie de medidas de ajuste, de regulaciones, de transferencias de plata de un sector a otro, y todo se basa en un ajuste fiscal para sostener, digamos, la baja de la inflación, pero que está fixiando la economía. Y esto se pretende sostener con, primero, con el ajuste fiscal, segundo con un buen aporte que pasó el blanqueo, pero, bueno, la plata que dan estos márgenes se acaba y por eso ahora recurren al endeudamiento. Bueno, los límites que encuentran es que el endeudamiento no es tan fácil. Y bueno, el Fondo pide devaluación, el Fondo pide garantías de repago, con lo cual, digamos, si ellos fixan la economía, el Fondo Monetario es más reticente a que le digan ‘Bueno, no me vas a poder pagar’. Bueno, yo creo que tiene un frente muy complicado el gobierno, porque todo lo que expresó que iba a mejorar la situación de los argentinos la viene empeorando.”

LCV: “Hay un run acerca de que el Fondo Monetario, los acreedores, el mundo financiero, bla, bla, bla, estaría pidiendo en este momento un cambio, que no es que se vaya Caputo. ¿El cambio de collar tendría algún tipo de efecto, o lo que hay que cambiar es el perro?”

Pablo Flores: “Mirá, me parece que los gobiernos suelen, suelen hacer, como, eh, cuando están complicados, suelen hacer como una suerte, digamos, de, de, a ver cómo decirlo, de como darle otra impronta al gobierno, diciendo que viene otra situación mejor. La verdad es que si no cambia la política y cambian la persona, claro, eh, no, como decís vos, no hay que, no hay que dejar de sacarle el collar, hay que dejar de ser perro, pero bueno.”

LCV: “¿Dónde van a concentrarse mañana? ¿Y qué carácter va a tener el paro en tu sector el jueves, no el miércoles?”

Pablo Flores: “Estamos todavía viendo. Nosotros siempre convocamos ahí, a nuestra sede, que es en Alsina 1440, para unirnos después a la columna general de la CGT, porque estamos a dos cuadras del Congreso. Pero, eh, nada, el paro después es un paro de 24 horas, con lo cual, eh, nada, nosotros sencillamente adherimos y esperamos una gran adhesión de los trabajadores.”

LCV: “¿No es paro con concurrencia, o sí?”

Pablo Flores: “No, no, no. Paro, paro total, actividades sin asistencia al trabajo.”

Continue Reading
Advertisement

Facebook

Copyright © 2017 Zox News Theme. Theme by MVP Themes, powered by WordPress.