fbpx
Connect with us

Destacada

“Stella Calloni. Periodismo, literatura y militancia. Cosas de mujeres” | El libro que recorre la vida de una de las periodistas más importantes de Latinoamérica

La escritora y poeta Mariana Baranchuk pasó por los micrófonos de La Columna Vertebral para charlar sobre el libro “Stella Calloni. Periodismo, literatura y militancia. Cosas de mujeres” que escribió junto a Viviana Elem y que reconstruye la historia de vida y las principales coberturas de la histórica periodista Stella Calloni.

“Un libro, una biografía autorizada que pretende constituirse en un legado. El legado de Stella Calloni para las nuevas generaciones de periodistas, de comunicadores. El legado de Stella para las mujeres que trabajan para ser y para los hombres que quieren comprender.

Este libro es la historia de una vida, de una vida de mujer, de una vida bien vivida, de una vida que le rinde homenaje al paradigma del buen vivir.

Una vida que, para quien pueda y quiera, es camino que ayuda a andar. Así en la vida, como en el periodismo, como en la militancia, como en la literatura”.

LCV: ¿Cómo fue hacer este libro con Stella Calloni?

-Fue una experiencia preciosa. Más que 70 horas de entrevistas, fueron 70 horas de conversaciones grabadas donde además lo central era correrla a Stella del lugar de confort, porque si le preguntas exclusivamente sobre la política de América Latina o de cualquier parte del siglo XX, Stella nada como pez en el agua, pero ya estaba escrito. Ya había un libro sobre la biografía de Stella, con prólogo de Fidel, con lo cual nos topamos nosotras después de haber tenido el horario de entrevista con Stella para convencerla y casi llamamos para decir “¿a qué vamos a ir?” Ya está hecha la biografía y el prólogo lo tiene Fidel, nunca vamos a tener un prólogo de Fidel. Entonces le empezamos a  buscar la vuelta y fue muy divertido porque hablábamos de cualquier cosa y a las dos horas nos pregunta qué estábamos haciendo ahí. Le dijimos queríamos hacer tu biografía autorizada y nos dice “¿ya saben que hay una?”. Sí, sabemos, pero nosotros queremos hacer algo distinto. En principio esa autobiografía la escribió un compañero varón. Nosotras queremos tratar de entender y ver cómo es esto de ser mujer y de hacer todas estas cosas al mismo tiempo. La maternidad, la militancia, la literatura, porque Stella además es una poeta de la hostia, cómo es que todo eso sí se puede y en una época que era peor. Queremos que sea un legado para jóvenes periodistas. Desentrañar no solamente a quien entrevistaste, sino cómo organizas una entrevista, qué diferencia hay para ella entre la crónica y la entrevista, cómo se organiza para hacerla, y al mismo tiempo esta cosa del legado de mujeres.

LCV: Son mujeres que han recorrido el periodismo sin dejar de tener una identidad de mujer. La forma en que ella contaba lo que era estar como única mujer en el medio del desierto con Gadafi, por ejemplo. 

-Sí, y con las cosas cómicas. Sentir que está entre mitad de los bombardeos y necesita una bandera blanca para pasar y no hay nada blanco y ata una bombacha. 

LCV: Además el amor y el humor. Ese tipo de cuestiones que la pintan de cuerpo entero. Estamos hablando de una mujer de 88 años.

-Abrirse paso como mina en ese momento y no renunciar a nada y poner las cosas en su lugar. En otras cosas ha sufrido esto de “ah, vos conseguiste esta entrevista porque…”. El amor es el amor, en donde es el laburo es el laburo y respetándolo. Después convivía con los compañeros varones y hacía cosas de una camaradería increíble y tener algunas visiones de lo que iban a llegar a ser algunos personajes. Narra su experiencia con Chaves cuando lo descubre, cuando Chávez no era Chávez. Leo una cosa que dice “acá va a pasar algo”. Con el respeto que ella tenía por Torrijos dice “es como Torrijos pero va a ir un poco más”. Hay una foto adentro del libro que es un encuentro con un amigo, como cualquiera que podamos tener nosotros, una noche de empanada y vino, hay tres personas en un sillón y ella está tirada sobre una compañera y la cabeza apoyada en un compañero que le está rascando la cabeza y es Chávez, un Chávez jovencito.


“Nos dijo: ‘¿saben que ya hay una biografía mía?’. Sí, pero queremos hacer algo distinto”

sobre el inicio del proyecto

LCV: También hay una foto de ella con Fidel y muchos le preguntaron si pasó algo entre ellos dos porque él la mira de una manera que todos queremos que alguien nos mire así y ella dice que no, y que en todo caso hay cuestiones que no tienen por qué formar parte de su historia como periodista.

-Son muchas horas de grabación y como cualquier charla de minas saltas de un tema a otro, después será organizar ese material además del trabajo sobre la escritura y ella un día porque sí, porque estaríamos hablando de los gatos o de cualquier cosa, ella dice hay cosas de las que nunca va a hablar, que nunca se sabrán, nadie dice todo lo que sabe.

LCV: Qué pena, sabés todo lo que tiene para hablar del tiempo que vivió en Paraguay con la guerrilla paraguaya, por ejemplo.

-Eso es maravilloso. Habló más de lo que está en el libro. Nosotros habíamos hecho el compromiso de que era una biografía autorizada, entonces hay cosas que dijo “mejor esto no”, y por eso lo sacamos. Igual dice muchas cosas que no había dicho en otros lados. Por momentos ella sabía que se estaba grabando y otras veces no sabía y decía “ay, qué bueno sería dar cuenta de todo esto”, y lo estábamos haciendo.

LCV: Son mujeres que han marcado el cómo ser mujer, llevar adelante esto y hacerte respetar.

-Cada uno de esos entrevistados con los que después tuvo además algún tipo de vínculo más allá de la entrevista, Torrijos fue medio como un padre de alguna manera porque en el momento más álgido le abrió la puerta, le dio laburo y la ayudó a poder recuperar a sus hijas. A ella el Golpe la agarra fuera del país y ella entra a buscar a las hijas y tiene conflictos graves para poderlas sacar del país por la negativa del padre de las chicas.

LCV: ¿Una de ellas no está en Nicaragua?

-Estuvo, ahora están las dos viviendo en Argentina. Ahí Torrijos fue muy solidario dando trabajo y hay una cosa de un respeto súper importante con él en esto, la cuidó en el momento más duro de la existencia. Después esta cosa que a mí me gusta y puse un subtítulo porque está hablando y dice “porque las chicas”, y en un momento caigo en la cuenta de que cuando dice las chicas estaba hablando de las Madres, entonces el subtitulo es “Las chicas de Plaza de Mayo”.

Stella Calloni | Periodismo Literatura y militancia | Cosas de Mujeres

LCV: ¿Dónde presentan el libro?

En el Centro Cultural Urondo que está en 25 de mayo 201, a una cuadra y media de Plaza de Mayo, el viernes 13 a las 19hs. También con un panel que se las trae, va a estar Nora Lafón que además es amiga de Stella desde muy jóvenes ambas, María Rosa Gómez y Ricardo “Patán” Ragendorfer. Cerramos con una musiquita de la señora Patricia Malanca que le ha puesto música a uno de los poemas más lindos de Stella y esa es la razón por la cual la hemos invitado, para que se cierre con ese cierre musical y por supuesto convidaremos un vinito a la entrada y a la salida.

LCV: Merece que la homenajeemos cada vez que podamos.

-El homenaje a los vivos, cosa que a veces no se hace, y la sacada de bronce porque cuando hablas con Stella es tan humana. Puedo contar las dos primeras veces que la vi. La primera vez que la vi en persona no le hablé. Me dio mucha vergüenza, estábamos en plena campaña de Scioli y Nora Lafón me dice “¿sabés quién es Stella acá?”. “Sí, claro”. “¿Podés ir y decirle que la estoy esperando en tal lado, por favor?”. “Sí, por supuesto”. Fui como el che pibe, transmití el mensaje, me dio mucha vergüenza y después me fui. Hice de asistente nivel 6 de Nora. La segunda vez que la encontré, y ahí sí hablamos, fue en una de esas cosas de barrio cerca de un 8 de marzo, entonces “las mujeres notables de Boedo”. A mi cuando me invitan me causó gracia porque en realidad vivo en San Cristóbal y Stella vive en Almagro, pero cuando llego y la veo a Stella pienso “ah, pero esto es en serio”. Yo iba a una cosa barrial, era una cosa barrial y estamos sentadas al lado y me dice “nena, ¿te fijas si tengo el maquillaje corrido? porque en realidad acabo de llegar de Venezuela, me tiré a descansar con la ropa puesta porque si no no me levantaba y me vine para acá”. Era un centro cultural del barrio de Boedo que decía tal y tal maestra eran mujeres notables del barrio, ese era el nivel. Le digo sí, está bien, pero acá se te corrió un poquito. Entonces empiezo a acomodarla y me dice “pero mojate el dedo y limpiame la cara”.

Seguir leyendo
Comentá

Leave a Reply

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.

Destacada

“Streaming en Argentina: Pablo Storino revela sueldos, precarización y la batalla del SATSAID por la registración laboral”

En exclusiva con La Columna Vertebral – Historias de Trabajadores, Pablo Storino, pro secretario gremial del SATSAID, aborda la situación laboral y económica del sector del streaming en Argentina. El dirigente describe las profundas desigualdades entre los distintos canales, los niveles de registración y precarización existentes, y el rol del sindicato frente a este nuevo escenario comunicacional.

LCV:

“¿Cuál es la situación laboral real de los canales de streaming? ¿Cómo es esto que parece un jolgorio? ¿Todo es divertido? Somos todos amigos, nos matamos de risa… pero cuál es la situación económica y laboral de los compañeros de streaming?”

Pablo Storino:

“La situación del mundo del streaming hoy es muy dispar. Existe un grupo reducido —un top 10 o 20— que logró monetizar sus contenidos, profesionalizarse y constituir unidades económicas que permiten formalizar relaciones laborales, registrar trabajadores y blanquear actividades. Pero también hay muchos otros que sobreviven como pueden, trasladando esa precariedad a quienes trabajan allí: falta de registración, salarios muy bajos y condiciones inestables. Esto genera la pregunta de si el streaming es una burbuja o si, con el tiempo, se asentará dejando afuera a quienes no puedan consolidarse como organizaciones empresariales.”


LCV:

“La mayoría está informalizada o son factureros.”

Pablo Storino:

“La situación es heterogénea. Hay empresas como Luzu TV, con 110 trabajadores registrados y salarios que van de dos a cuatro millones de pesos. Y hay otras como Olga, con un alto nivel de precarización, donde muchos jóvenes están como monotributistas cobrando entre 500.000 y 600.000 pesos. En algunos canales hay explotación evidente, y son justamente los que desde el SATSAID estamos denunciando y tratando de regularizar. También existen proyectos como Gentina, Futurock, Vorterix o Bondi que tienen relaciones laborales formalizadas y en condiciones.”


LCV:

“Perfecto. Bien o mal, ¿no? Porque estos sueldos que me decís serían formalizados. ¿Bien o mal?”

Pablo Storino:

“Totalmente. Es trabajo registrado, con aportes a la jubilación, a la obra social y todos los derechos laborales que corresponden.”


LCV:

“Buena cuna tiene ese pibe. Sé que viene de una familia de trabajadores y no se quedó en el camino con la experiencia. ¿Cuál ha sido la experiencia general?”

Pablo Storino:

“Existe una situación común tanto en proyectos identificados con la derecha como con la izquierda. Por ejemplo, algunos streaming de línea más conservadora desconocen las leyes laborales y evaden responsabilidades, pero lo mismo sucede en otros que se presentan como progresistas. Desde el SATSAID entendemos que la falta de registración responde a una lógica económica transversal: no pagar aportes patronales ni cumplir con los pisos salariales establecidos por el convenio colectivo. Contra eso nos enfrentamos todos los días, venga de donde venga.”


LCV:

“La paritaria de los trabajadores de cable: ¿cómo cerró?”

Pablo Storino:

“En este contexto, la paritaria viene cerrando bien. Logramos que las empresas de la Cámara TAC paguen mes a mes el índice de inflación del INDEC, aunque no coincidamos con el método de cálculo del organismo. Por lo menos eso evita una pérdida mayor del poder adquisitivo. Llegar a este acuerdo requirió asambleas, paros y mucha presión, pero finalmente TAC entendió que no íbamos a aceptar que los salarios quedaran por debajo de la inflación.”

Continue Reading

Destacada

Daniel Yofra: “Vamos a tener que armar Frente Sindical para resistir la reforma laboral”

En exclusiva con La Columna Vertebral-Historias de Trabajadores, Daniel Yofra expone la postura del Sindicato de Aceiteros frente al avance de la reforma laboral impulsada por el Gobierno nacional. Desde la crítica a la inacción de las centrales sindicales hasta el análisis de la situación industrial y el impacto en los derechos laborales, Yofra plantea la necesidad de construir un frente sindical amplio para enfrentar los cambios propuestos. La conversación aborda tanto las implicancias materiales de la reforma como el rol político del sindicalismo en el actual contexto económico y social.

LCV:
“Contame la postura del Sindicato de Aceiteros frente a la reforma laboral.”

Daniel Yofra:
“Estamos preocupados por lo que está pasando y por la inacción del sindicalismo ante una reforma laboral que, en algunos casos, va a legalizar la precariedad laboral y, en otros, va a intentar imponerla cuando tengan la herramienta para hacerlo. Nosotros vamos a salir a luchar como siempre lo hicimos, como el año pasado con la Ley Bases. Este año no será la excepción. Vamos a oponernos porque es un legado que nos dejaron los trabajadores y trabajadoras aceiteros y desmotadores. Tenemos la responsabilidad de defender lo que otros conquistaron y ya no están: desaparecidos, asesinados, encarcelados. Todo lo que ocurrió en la historia de la lucha obrera hoy lo quieren borrar de un plumazo bajo el título de ‘modernidad laboral’, cuando en realidad quieren volver cien años atrás.”

LCV:
“¿Piensan llevar adelante una huelga si avanza la reforma? Supongo que no como una acción aislada, sino como parte de la unidad sindical.”

Daniel Yofra:
“Estamos tratando de que otras organizaciones se sumen y esperamos que la nueva CGT o el nuevo triunvirato entiendan que hay que ir a una huelga, salvo que tengan otra estrategia que hasta ahora no ha funcionado. Ni siquiera los llaman a discutir la ley. Los empresarios escriben la reforma laboral y este Gobierno la lleva adelante porque tiene compromisos con quienes lo llevaron al poder.”

LCV:
“Esto de que los empresarios escriban las leyes ya pasó con Macri. Hoy, con el respaldo electoral que tiene, Milei cree posible avanzar en reformas que afectan a todos los sectores industriales. ¿Cómo visualizás este escenario, especialmente respecto a la desindustrialización, la caída del empleo y la pérdida de mano de obra calificada?”

Daniel Yofra:
“En nuestro sector no se siente la importación indiscriminada, pero sí afecta a sectores que dependen del mercado interno. Cerraron más de 20.000 pymes y hay 270.000 trabajadores despedidos. Muchas empresas están importando lo que antes producían, como la química de Río Tercero, que fabricaba insumos para colchones y hoy los importa, dejando a más de 200 trabajadores en la calle.”

LCV:
“Si avanzara la flexibilización horaria, el salario variable —el ‘sueldo dinámico’— o las vacaciones en cuotas, ¿cómo sería la industria bajo ese régimen?”

Daniel Yofra:
“Los trabajadores perderían la posibilidad de ordenar su vida fuera del empleo. No podrían programar vacaciones ni prever ingresos básicos. Sería tan simple y grave como eso.”

LCV:
“Muchos argumentan que hoy la informalidad ya impide planificar la vida.”

Daniel Yofra:
“Esto empeoraría la situación de quienes hoy sí tienen estabilidad laboral. Hay casi 9 millones de trabajadores registrados. El año pasado decían que la reforma iba a traer inversiones y empleo; no ocurrió nada. Los empresarios no necesitan que se quiten derechos. Necesitan industrializar la materia prima, necesitan crédito, necesitan que haya consumo. Con salarios por debajo de la pobreza —más del 90% de los registrados están así— no hay consumo, no hay producción y no hay trabajo.”

LCV:
“Se suele decir que los sindicatos industriales están defendiendo a un universo de trabajadores cada vez menor. Lo que planteás va en sentido contrario.”

Daniel Yofra:
“Hoy tenemos dos problemas. Primero, diputados y senadores que nunca trabajaron bajo patrón, dependen de patrones o directamente lo son. Van a instalar mentiras para poner a la sociedad en contra del sindicalismo y de la CGT, que es la central más grande del país y de Sudamérica. Segundo, la inactividad de la CGT. Si no cambia el rumbo, creyendo que sólo con diálogo lo logrará —cuando ni siquiera los llaman— será difícil torcer la historia. Seguramente vamos a tener que armar un frente sindical que luche contra esto.”

LCV:
“Para cerrar: ¿están trabajando en algún proyecto alternativo a la reforma? ¿Hay algo con los diputados sindicales o dentro de la CGT?”

Daniel Yofra:
“No participé de la reunión con los compañeros supuestamente afines al movimiento obrero. Creo que son muy pocos para el momento de la votación y no tengo detalles de la contrapropuesta. Pero no hace falta ser científicos para mejorar la vida laboral. Nosotros lo comprobamos con los comités mixtos de seguridad e higiene. Bajamos la accidentología y las muertes laborales, incluso sin una ley vigente en muchas provincias. Los derechos de los trabajadores también benefician a los empresarios. Ellos se quejan de la industria del juicio, pero no hacen nada para evitar accidentes. ¿Qué quieren? ¿Trabajadores mutilados y sin indemnización?

Continue Reading

Destacada

“18 años de proscripción, memoria y militancia: conversación con Gustavo Campana”

El periodista Gustavo Campana reconstruye recuerdos personales y políticos alrededor del 17 de noviembre de 1972, fecha del regreso de Juan Domingo Perón a la Argentina tras 18 años de exilio. Desde la mirada de un niño de 10 años que seguía los acontecimientos desde un televisor en blanco y negro, hasta el análisis histórico de la resistencia, la militancia, el rol del movimiento obrero y las operaciones del poder real, Campana hilvana una lectura profunda del período y de sus continuidades hasta el presente. La charla, atravesada por testimonios personales de quienes vivieron la época, permite comprender por qué el Día de la Militancia es, además de una efeméride, una narrativa colectiva de lucha, memoria y disputa política.

LCV: “¿Dónde estabas vos el 17 de noviembre de 1972?”

Gustavo Campana: “Cumpliendo 10 años y mirando desde el televisor en blanco y negro de mi casa lo que sucedía en Seisa y en sus alrededores. Lo vivía desde un lugar particular, porque el decreto 4161 nos había marcado.
Nací en el 62, por lo tanto Perón era el hombre prohibido, el que no se podía nombrar. Era ese peronismo que, en la clandestinidad, le contaba todos los días al pueblo que seguía vivo.
A principios del 72, finales del 71, empezó a aparecer a través de los noticieros que levantaban un poco la persiana de la censura. Eran esos reportajes donde le preguntaban: ‘¿Qué va a hacer usted para volver?’ ‘Nada. Todos mis enemigos.’ ‘General, durante tanto tiempo hubo gente que quería que usted se muera y hoy no quiere que se refríe.’ ‘Se están acordando tarde, porque ahora me estoy muriendo.’
Todo eso llegaba al living, al televisor sin control remoto y en blanco y negro, y atravesaba a un pibe de 10 años por todas partes.”

LCV: “¿Qué impronta había en tu casa? ¿Qué opinaba tu madre mientras cocinaba o tu padre? ¿Qué les provocaba ese regreso?”

Gustavo Campana: “Mi viejo había sido obrero gráfico y militante socialista. En ese momento trabajaba como portero en Belgrano. No le daba para ser antiperonista, pero estaba cerca. Mi mamá era más silenciosa, pero la información entraba por todos lados.
Y había algo claro: un año después mi viejo no votó ni a Cámpora ni a Perón. Seguramente votó a Corvalán en marzo del 73. En la segunda vuelta no sé; estaba mal. No tan mal… pero por ahí andaba.”

LCV: “Antes de ir al país al que vuelve Perón, una pregunta importante para quienes son jóvenes: ¿por qué el 17 de noviembre se transforma en el Día de la Militancia?”

Gustavo Campana: “Porque ‘lucharon y volvió’. Ese es el dato central.
En ese ‘lucharon’ hay una mixtura entre la resistencia peronista, que se pone de pie tras el golpe del 55, y la juventud maravillosa que se suma a fines de los 60, en el trasvasamiento generacional del que hablaba Perón en sus entrevistas con Pino y Getino.
La Juventud Peronista fue clave, pero no fue la única: estaba el trabajo de la resistencia del 56, el Plan Conintes, la pelea en la calle de los grupos armados —Uturuncos, FAP, Montoneros—, la tendencia, la CGT, el corazón peronista de la CGT de los Argentinos, y el Cordobazo con Atilio López.
Todo ese encadenamiento de hechos empuja a un régimen en decadencia, la tercera etapa de la Revolución Argentina, que había pasado por Onganía, por el experimento breve de Levingston y finalmente por Lanusse.
Todos necesitaban a Perón, propios y extraños.”

LCV: “Estamos haciendo un documental sobre sindicalistas desaparecidos. Ricardo Vaschetti nos decía que desde el minuto cero en que se abrió el proceso electoral que llevó a Cámpora ya se estaba armando el golpe del 76. ¿Coincidís?”

Gustavo Campana: “Sí. El golpe del 76 es un objetivo claro, sobre todo después de la muerte de Perón.
El Grupo Ascuénaga —Martínez de Hoz y compañía, reunidos en un petit hotel de la calle Ascuénaga, propiedad de Blaquier— empieza a tejer la política económica que después se aplicará, respaldada por Rockefeller, el Chase Manhattan Bank y Kissinger.
Después del 11 de septiembre del 73, con el golpe en Chile, se consolidó el Plan Cóndor y la decisión del poder real de cambiar la matriz económica: de un país industrial, con trabajo a tres turnos y 2% de desocupación, a un país rentístico-financiero dedicado a la especulación.
La implosión del país no empieza en el golpe: tiene una etapa anterior, el Rodrigazo, armado por la derecha liberal.”

LCV: “Incluso a nivel leyes: la de represión a movimientos subversivos en espacios sindicales sale en el 74.
Pero volviendo al 72: Cámpora dijo que la primera medida económica de Perón sería la independencia del Fondo Monetario. ¿Qué significa eso?”

Gustavo Campana: “Perón logró durante 9 años que la Argentina no ingresara al Fondo Monetario. Entre 1946 y 1955 fuimos el único país de América Latina que no entró en la institución creada en el 44.
Estados Unidos sabía que Perón era un mal alumno para el orden mundial de posguerra.
En ese período construyó la industria nacional, desarrolló ciencia y tecnología propia y consolidó derechos laborales.
El golpe del 55 tuvo como tarea desarmar todo eso. Fueron 14 toneladas de explosivos en Plaza de Mayo, más el golpe, más los fusilamientos del 56, para poder entrar al Fondo Monetario en el 57.
No es un dato menor. Junto con el Banco Mundial iban a regir los destinos económicos de América Latina.”

LCV: “Cada vez que charlamos pienso: ¿cómo hacer para que seas columnista de La Columna Vertebral? Con vos uno dice ‘plum’ y aparece toda la historia detrás.
Feliz Día del Militante.”

Gustavo Campana: “Para ustedes también. Vamos a seguir encontrándonos en estos espacios.
Y veremos si las chicas de La Columna Vertebral logran seducirme para sumarme.
Un abrazo inmenso.”

LCV: “Quiero cerrar con algo. Yo soy exactamente la generación intermedia: entre el pibe del televisor blanco y negro y la resistencia. Estaba intentando llegar a Ezeiza esa mañana.
Un compañero me decía: ‘¿Dónde estabas vos?’ Yo no pude llegar. ¿Te acordás cómo nos mojamos?
Cada uno tenía su anécdota. La mía es así: le dije a mi mamá que iba a estudiar a la casa de una compañera. Me quedé a dormir. Lluvia torrencial, barro, policía que nos corría, volvimos llenas de barro. Y cuando llego, mi mamá me dice: ‘Yo sabía quién lo tiró.’ Nos empezamos a reír.
Pobre vieja. Al lado de eso, todos los que vinieron después eran santos comparados con nuestra generación.”

Continue Reading
Advertisement

Facebook

Copyright © 2017 Zox News Theme. Theme by MVP Themes, powered by WordPress.