Entrevistas
Daniel Arroyo: “Falta comida en los comedores, hay que decretar la Emergencia Alimentaria”
Luego de las jornadas de largas colas frente al Ministerio pidiendo comida para los comedores populares, LCV entrevistó al ex ministro de Desarrollo Social y actual diputado de Unión por la Patria, Daniel Arroyo, quien estuvo a cargo de varios planes de contención social. Se mostró procupado por la situación de los comedores y el hambre en la infancia, consideró que hay que decretar la Emergencia Alimentaria, y encontrar una solución para las familias endeudadas con tasas de interés de usureros que llegan al 500%: “Se preocupan por blanquear las deudas de los que se llevan millones afuera pero nadie le presta atención al vecino que tiene que pedir 30 o 40 o 100 mil pesos para sobrevivir”

LCV: ¿Qué sentís al ver que herramientas como el Potenciar Trabajo, creadas para contener a los sectores más vulnerables, están siendo destrozadas?
—Mucha preocupación. Lo peor es la situación de los comedores. Está faltando comida y los que no llegan a fin de mes solo encuentran fideos, harina, polenta; hay poca leche, carne, frutas y verduras. Respecto al plan Potenciar Trabajo, que son 1.200.000 personas, más allá de lo que se puede mejorar en cuanto al vínculo con el trabajo y la capacitación, el problema es que quedó congelado el monto en 78 mil pesos. Si ya era muy poquito eso en noviembre, en marzo de este año va a ser nada. Entonces la verdad que se está licuando. Yo creo que el Gobierno tiene que desarrollar una malla de contención social, un conjunto de políticas que la pueda hacer de una manera o de otra, que a uno le puede gustar más o menos, pero tiene que desarrollar una malla de contención social rápidamente.
LCV: Fuimos a cubrir la cola en el Ministerio de Desarrollo Humano. Una señora que se llama Jazmín Saravia, que estaba en la puerta decía “tenemos que rotar las familias porque no nos alcanza para todos”. Vos implementaste en julio del 2020 el Renacom, que era el Registro Nacional de Comedores y Merenderos, que para tener una geolocalización de todo esto ¿Eso está vigente? ¿Creció mucho desde aquel momento hasta ahora? ¿Cómo es la situación y qué pensás de lo que decía Jazmín?
—Hoy, hay 10 mil comedores en Argentina. Para ser claro, en términos generales, hay 10.000 comedores y tenemos casi 10 millones de personas que reciben asistencia alimentaria. Estoy juntando acá de los chicos que comen en las escuelas, más la tarjeta alimentar, más las personas que van a los comedores y a los merenderos. Lo que decía la señora es exactamente así. Hace tiempo que viene complicado. Lo que pasa es que en los últimos días pegó un salto muy grande el precio de los alimentos, es decir, el pan a 2 mil, la leche 800, o como decía la propia señora, el arroz a 2 mil pesos. Entonces, lo que está pasando hoy es que hay mala nutrición, o sea, se está comiendo como antes decía, fideos, harina, arroz, polenta, se está complicando la situación y ahí hay un problema grave. Que la gente grande comamos mal es un problema relativo porque ya tenemos la estructura ósea desarrollada al igual que nuestro intelecto, pero que un niño o una niña coma mal es brutal porque no desarrolla el peso y talla que podría desarrollar, no desarrolla la capacidad intelectual, no puede prestar atención en la escuela y reproduce la pobreza. Entonces, me parece que es urgente atender el tema del inventario. Es difícil para el Gobierno y entiendo que es así porque es difícil para el Estado comprar alimentos, porque hoy nadie vende, porque no hay precio, pero hay que generar mecanismos o a través de la tarjeta, o a través de parte de la asistencia alimentaria o decretando la emergencia alimentaria.
LCV: ¿Cuántos años hace que vivimos en emergencia alimentaria?
—Varios años. De hecho, cuando yo era diputado de la oposición, cuando gobernaba Macri, hice la Ley de Emergencia Alimentaria para ayudar. La emergencia alimentaria lo que le permite es acelerar los circuitos administrativos para comprar alimentos y la verdad que estamos en un problema serio hoy, es evidente que eso hace falta. Está muy difícil la situación. Yo creo que hay tres problemas acá que hay que darle solución rápido. El primero es que tienen que llegar los alimentos a los comedores. El segundo es el tema de la escuela, arrancan las clases ahora en 20 días y lo que es la ayuda escolar que da el Estado está presupuestada en 17 mil pesos. Hoy un guardapolvo para un chico de primaria son 31 mil pesos, para un nene de jardín 14 mil. Con lo cual, lo segundo que tiene que hacer el gobierno es aumentar la ayuda escolar. Más allá de si a uno le gusta el gobierno o no y todos los debates ideológicos, yo estoy lejísimo de la mirada del Gobierno, pero le planteé un proyecto para aumentar la ayuda escolar así por lo menos los chicos arrancan con una mochila, con un cuaderno, con un conjunto de útiles, una cartuchera, las zapatillas y el guardapolvo. Lo tercero que yo veo y que a mi me preocupa mucho es el endeudamiento de la familia, que realmente como la plata no alcanza, la gente se endeuda y hoy se endeuda al 500% de interés anual. Hoy la persona está tomando crédito en la financiera de la esquina, a la vuelta, en cualquier lado al 500% y paga varias veces la deuda que tiene. Entonces, así como se habla de blanqueo, de blanqueo de capitales, de blanqueo de los que tienen dólares afuera bajo el colchón, hay que ayudar a blanquear que debe 30, 50, 100 mil pesos, que lo sacó para comer, que lo sacó para comprar guardapolvos a los chicos, que en realidad lo pagó varias veces ya. Entonces yo iría por eso. Alimento para los comedores, aumentó de la ayuda escolar y desendeudar a la familia, por lo menos para poner una base.
LCV: ¿No debería estar el control del Estado en eso en lugar de estar controlando las otras tonterías a las que quiere controlar?
—Absolutamente. Lula hizo un programa que es que el brasileño que debe 100 reales, no puede pagar más de 200. Se le puso un tope. Yo hice un proyecto de ley con lo mismo. Es decir, uno no puede pagar más del 100%. O sea, es una locura. Si ya la pagó 20 veces. El que sacó 30 mil cuando devuelve 60 mil ya está. No puede vivir toda la vida devolviendo, devolviendo y pagando y pagando y endeudado permanentemente. Ese tipo de cosas son las que hay que encarar. Yo trato de tener una mirada doble, una de una mirada crítica y así lo expreso en el Congreso respecto del Gobierno, la orientación. Creo que es un experimento absurdo lo que está haciendo el Gobierno, quitando el Estado del todo y haciendo el mercado de lo bestia. Pero dos, trato de que alguna cosa pase, el tema escolar, el tema del endeudamiento, el tema de la comida en los comedores. Espero que eso sea posible porque la verdad está muy, muy difícil la situación. Hay mucha gente que la pasa mal, mal, mal en serio.
LCV: ¿Vos crees realmente que existe la mínima posibilidad de diálogo?
—Primero, yo creo que hay que insistir con el diálogo, básicamente. Tengo la peor opinión del Gobierno y la orientación que hace el Gobierno, pero realmente me parece que acá hay que atender lo básico de lo básico.
LCV: Ustedes manifestaron su repudio por el tema de los ataques a la gente en la calle y a los periodistas.
—Sí, yo estuve en la calle de hecho. Nosotros salimos de la sesión y fuimos a la calle el jueves. Era una cosa brutal. La pelea era por si avanzaban media cuadra hacia la mitad de la cuadra o no. Esa era toda la discusión. Toda la gente que estaba reclamando y manifestándose estaba en contra de la ley, claramente, estaban arriba de la plazoleta, avanzaban, entraban, corrían. Una locura. Gas pimienta, las motos dando vuelta a los bastonazos. Una cosa absurda. Una represión brutal. No se puede aplicar el protocolo a como dé lugar. El debate finalmente era media cuadra, esa era toda la discusión.
Destacada
Martín Carrera: Fiesta del Juguete Artesanal, una comunidad que vuelve a crear con sus manos
En Rawson se realizó por primera vez la Fiesta del Juguete Artesanal, una iniciativa impulsada por “La Desfábrica de Juguetes”, proyecto coordinado por Martín Carrera y Violeta Argañarás. La propuesta reunió a familias, artesanos, museos y la comunidad para recuperar el valor cultural, creativo y afectivo del juguete hecho a mano. En exclusiva con La Columna Vertebral, Martín cuenta cómo surgió la idea, qué significa trabajar con juguetes reutilizados y por qué este tipo de eventos vuelve a conectar a chicos y grandes con la imaginación y el oficio.
LCV: “El lema era ‘juguemos a hacer juguetes’. Hicieron la fiesta el 2 de noviembre, la primera fiesta del juguete artesanal en Rawson. ¿Cómo fue? Contanos la participación, los talleres y todo lo que pasó.”
Martín Carrera: “Antes que nada, gracias por la comunicación. Violeta Argañarás y yo trabajamos hace años en un proyecto llamado La Desfábrica de Juguetes. Hace un año vivimos en Rouson y este año, dentro de las actividades del proyecto, realizamos la primera Fiesta del Juguete Artesanal.”
LCV: “¿Por qué se llama Desfábrica?”
Martín Carrera: “Es el nombre de un proyecto basado en actividades vinculadas a construir juguetes con grupos de niños. Reutilizamos juguetes rotos, juguetes que ya no se usan y materiales reciclables. Les damos una segunda oportunidad, especialmente a los plásticos descartados por la industria, combinándolos con la juguetería tradicional.”
LCV: “Cuando yo era chica existía el Hospital de Muñecos. Me encantaba ver cómo volvían a tener vida. Ustedes usan partes, no los reparan. Y en la gacetilla hay algo que me gusta mucho: por qué se celebran los juguetes artesanales. Contame.”
Martín Carrera: “Nuestro enfoque es el juguete como objeto cultural. El juguete artesanal nos atrae tanto a Violeta como a mí, y valoramos los oficios manuales como la carpintería y otras técnicas. Buscamos que los chicos puedan crear su propio juguete, su propio invento, a través de un trabajo artesanal que los conecte con su creatividad.”
LCV: “En la gacetilla dice: ‘Los juguetes transmiten las historias de los lugares donde se hicieron’. Y pienso en juguetes con tela local, muñequitos de paja hechos con trigo de la zona, títeres hechos con guantes de las abuelas. ¿Cómo integraron ese acervo con los chicos de hoy, que viven rodeados de pantallas?”
Martín Carrera: “Con los grupos fijos hacemos recorridos a través de distintas formas de juguetes que permiten vincular historias familiares, comunitarias y culturales. La fiesta reunió a la comunidad y a gente de otros lugares para vivir esa experiencia. Además, el juguete, incluso desde la infancia, es un objeto cultural que vincula generaciones. Cualquier intervención que hagamos los adultos, incluso sentarnos a jugar con los chicos, ya crea un puente entre generaciones y fortalece la transmisión cultural.”
LCV: “¿La creatividad de los juguetes se vincula con relatos o cuentos?”
Martín Carrera: “Sí. En el taller trabajamos con cuentos, especialmente con los grupos más pequeños que tal vez no tienen tanta destreza manual. Contamos historias relacionadas con el juguete que van a construir. Tenemos libros de cuentos que nosotros mismos vamos elaborando, con temáticas vinculadas al juego.”
LCV: “¿Cuándo va a ser la próxima fiesta? Me la perdí y quiero ir a la siguiente.”
Martín Carrera: “Estás invitada. Todavía no tenemos fecha, pero seguramente sea el año que viene. Esta fue la primera edición y creemos que es la única fiesta del país dedicada exclusivamente al juguete artesanal. La propuesta tuvo tres ejes: talleres abiertos de construcción durante toda la tarde; un taller especial dictado por el Museo del Juguete de San Isidro sobre muñecos Tenta Enempen; y un espacio de juegos y juguetes para juego libre. A eso se sumó una feria de artesanos y emprendimientos de juguetes artesanales, con casi veinte expositores de toda la provincia.”
Destacada
Gustavo Morteo: El panorama de la apicultura y el rol de las cooperativas
En una extensa conversación con La Columna Vertebral, Gustavo Morteo, referente de la Federación de Cooperativas Apícolas, detalla el presente del sector, marcado por la pasión, la crisis y la búsqueda de nuevas herramientas comerciales.
La Federación, integrada por más de 35 cooperativas de todo el país, nació como una entidad de segundo grado con fines gremiales. Hoy intenta sumar peso comercial. “Queremos que la federación pueda hacer las dos cosas: representar al sector y empezar a operar comercialmente”, explica Morteo.
LCV: “Contame exactamente qué significa la Federación de Cooperativas Apícolas y cuánto hace que está constituida esta cooperativa de segundo grado.”
Gustavo Morteo: “La Federación de Cooperativas Apícolas es una entidad de segundo grado que agrupa a las cooperativas de primer grado, es decir, las cooperativas apícolas, que en conjunto conforman la federación. Participan cooperativas de todo el país, ya que es una federación nacional con más de 35 cooperativas.”
LCV: “Ajá.”
Gustavo Morteo: “Entre todas buscamos utilizar la federación como una herramienta gremial, pero también queremos darle volumen comercial. Estamos empezando a incursionar en esa dimensión para combinar lo gremial con lo comercial.”
LCV: “Gustavo, ustedes comercializan… ¿cuáles son los productos que comercializan?”
Gustavo Morteo: “El grueso de las cooperativas trabaja con miel a granel o miel fraccionada. También proveemos insumos que necesitan los productores: envases, medicamentos, materiales de apicultura, indumentaria y otros elementos. Además comercializamos la producción, tanto a granel como fraccionada, y las distintas variantes: producción de material vivo y derivados.”
LCV: “¿Qué es material vivo? Contame.”
Gustavo Morteo: “Es la provisión de colmenas para otros productores que desarrollan la actividad.”
LCV: “Me encanta. Desde la colmena hasta la ropa del trabajador. ¿Ustedes tienen todo eso dentro de la federación?”
Gustavo Morteo: “Intentamos articularlo. A veces es difícil porque hay cooperativas en el norte del país, otras en Buenos Aires, Córdoba, San Luis o Santa Fe. Son realidades distintas. En algunas zonas se producen abejas y en otras miel, según las floraciones. En áreas con mucho polen se produce más abeja; en zonas con más néctar, como Buenos Aires, se produce más miel. En Mendoza o en el norte, por ejemplo, hay más proteína, por lo que la abeja se reproduce más que en la provincia de Buenos Aires.”
LCV: “Entonces se me agolpan preguntas, pero quiero ir de a poco porque es una industria fascinante. ¿Cuánto tarda en formarse un apicultor?”
Gustavo Morteo: “Un apicultor nunca termina de formarse porque la abeja es un animal muy adaptable, y el apicultor debe aprender continuamente. En la escuela de apicultura de Tandil, donde soy parte, la formación básica dura un ciclo biológico, aproximadamente un año y medio. Luego los alumnos deben continuar profesionalizándose con tecnicaturas y formación específica.”
LCV: “¿Y de dónde vienen esos alumnos? ¿Son hijos de apicultores o es una vocación nueva? ¿Qué motiva a un joven a acercarse a la apicultura?”
Gustavo Morteo: “Hoy es una vocación más sentimental que económica. La actividad no atraviesa su mejor momento en términos de rentabilidad debido al clima y los cambios en la actividad agrícola. Los costos aumentaron. No es una actividad que entusiasme por lo rentable, sino por la pasión. Obviamente uno busca ganar dinero, pero hoy pesa más el vínculo emocional con la apicultura.”
LCV: “¿Tienen competencia de importación?”
Gustavo Morteo: “No. Lo que sí tenemos son problemas al vender, principalmente por los aranceles que impuso Estados Unidos. Eso nos baja los precios y dificulta las ventas en uno de nuestros principales mercados.”
LCV: “Cuando venden a granel, ¿quién es el cliente? ¿Y la miel fraccionada dónde se vende?”
Gustavo Morteo: “El fraccionado se vende mayormente en el mercado interno. El granel es para exportación. Estados Unidos es uno de los principales compradores, aunque hoy aplica dumping y otros aranceles. Europa también compra, pero paga mucho menos.”
LCV: “¿Qué industrias se nutren de la miel además de la gastronómica?”
Gustavo Morteo: “El grueso del consumo es domiciliario. Lo industrial es mínimo.”
LCV: “¿Cosmética, bebidas alcohólicas…?”
Gustavo Morteo: “Representan un volumen ínfimo. El fraccionado apenas representa entre el 5% y el 7% de la producción total. No mueve el amperímetro respecto al granel.”
LCV: “Vos sabés que cuando dijiste Europa pensé en champú, cremas… ¿Usan miel real o esencias?”
Gustavo Morteo: “Usan miel, pero en proporciones muy pequeñas dentro del producto. No es un consumo masivo.”
LCV: “Con muy poquita miel hacen mucho…”
Gustavo Morteo: “Si querés un jabón con miel, lleva mucha glicerina y poca miel.”
LCV: “¿Vos cómo llegaste a este negocio?”
Gustavo Morteo: “Por familia. Desde los 12 años ayudaba a mis hermanos y a mi papá. Crecimos a media cuadra de uno de los productores más grandes de Sudamérica, la familia Carrasco. En la zona todos aprendieron el oficio allí, por lo que la actividad se difundió mucho. Una vez que entrás, te enamorás. Lo económico va y viene, pero la pasión crece.”
LCV: “¿Y tu familia? ¿Tus hijos también se dedican?”
Gustavo Morteo: “Mis hermanos también trabajan en la actividad y compartimos la cooperativa. Nuestra cooperativa se fundó en 1989, así que ya superamos varias etapas difíciles.”
LCV: “Tal cual.”
Gustavo Morteo: “Hemos pasado varios combates.”
LCV: “Las cooperativas también sufren crisis periódicas. ¿Cuál fue el peor período y cuál es la situación actual?”
Gustavo Morteo: “El peor fue en 2003-2004, con la crisis de los residuos nitrofuran. Hubo una supuesta contaminación que se transformó en una barrera paraarancelaria. Durante dos años no pudimos comercializar. No sabíamos dónde estaba el problema. Fuimos manoseados por exportadores y algunos organismos públicos.”
LCV: “¿Y de ahí se levantaron?”
Gustavo Morteo: “Sí. La provincia de Buenos Aires financió la compra de un equipo para un laboratorio que permitió analizar contramuestras y buscar el origen del problema. Cuando el equipo empezó a funcionar, el problema desapareció.”
LCV: “¿Y hoy cómo estamos?”
Gustavo Morteo: “Complicados. El combustible es carísimo y esencial para la producción. La chapa de los tambores también, llegando a representar entre el 12% y el 15% del valor del producto. Hoy 1 kg de miel equivale a 1,3 litros de gasoil.”
LCV: “Terrible.”
Gustavo Morteo: “Sí.”
LCV: “El análisis de estas dificultades fue uno de los temas que hablaron con Gildo Honorato.”
Gustavo Morteo: “Sí. También hablamos de la necesidad de regularizar las cooperativas provinciales para que puedan recibir acompañamiento. Y trabajamos en un proyecto de la federación para comprar insumos, transformarlos en kilos de miel y exportarlos directamente.
“Para avanzar, necesitamos cooperativas ordenadas. Lo que está claro es que cuando el Estado está presente, controla y trabaja junto a las cooperativas, estas crecen. En la nuestra pudimos desarrollar un aserradero, una carpintería, un área de limpieza de cuadros y un sector de fraccionamiento, todo gracias al acompañamiento estatal. Cuando el Estado funciona y controla, protege a los ciudadanos.”
Entrevistas
“El exilio dejó huella en Italia”. Entrevista a los directores de Resistenza
Después de su recorrido por Festivales, Salas y otros espacios de Italia y Argentina, “RESISTENZA (historias del exilio argentino en Roma)” está disponible desde el 13/11/25 en la plataforma OpenDDB: https://openddb.it/film/resistenzaargentina/
Un documental que explora los modos que adquirieron la sobrevivencia y la denuncia internacional durante la última dictadura militar. Más allá de la tristeza, el desarraigo y las dificultades económicas, los exiliados argentinos diseminados por el mundo tendieron redes de solidaridad y realizaron un trabajo tenaz dando a conocer las violaciones a los Derechos Humanos en Argentina. No sabían, en ese entonces, que se estaban convirtiendo en protagonistas de un movimiento que dejaría sus huellas a futuro en los países que los acogieron, gracias a una forma de lucha silenciada por el régimen pero que perduró, con amor y creatividad hasta el día de hoy.
En Italia nació una organización italo-argentina, Proyecto Sur. En torno a ellos crecen, desde el pie, nuevas formas de acción en un mundo cada vez más violento y fraccionado. Ahora las murgas argentinas son un símbolo en toda manifestación por la paz y la justicia en Roma
LCV conversó con los directores del documental “Resistenza, historia del exilio argentino en Roma”, Mónica Simoncini y Omar Neri. ¿Por qué Roma? ¿Qué dificultades encontraron? ¿Cómo es trabajar como documentalista hoy? La culpa como trasfondo de estar vivo, la política no cultural de Milei y más.
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